México: debate deslucido
7 de mayo de 2012El esperado debate realizado el domingo en la noche (06.05.2012) en el World Trade Center de la Ciudad de México, en donde los cuatro aspirantes a la presidencia de México respondieron sobre sus respectivas estrategias en materia de seguridad, crecimiento económico y empleo, se convirtió en escenario de descalificaciones mutuas.
El político que lidera las encuestas sobre la intención de voto, el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto, se convirtió en el blanco de los ataques de la oficialista Josefina Vázquez Mota, del gobernante Partido Acción Nacional (PAN) y del candidato de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, del Partido de la Revolución Democrática (PRD). El candidato del Partido Nueva Alianza (Panal), Gabriel Quadri, respondió a las preguntas de manera puntual y documentada y fue el que brilló en la velada al quedar fuera del fuego cruzado de sus adversarios.
Papeles invertidos
"Es como si los papeles se hubieran invertido. Peña Nieto parecía como el presidente en turno que busca la reelección y que tenía que defender su gestión de gobierno“, afirma el politólogo alemán Günther Maihold.
Preguntado por Deutsche Welle sobre sus impresiones, el académico destaca que el simple hecho de que el candidato tricolor lidere con una amplia ventaja implica que los roles de los aspirantes han cambiado. "Peña Nieto tuvo que defenderse de las acusaciones, cuando en realidad debería haber sido al revés, indagar y preguntar a Josefina qué ha hecho bien el PAN en estos doce años de gobierno", afirma el acaddémico, que dirige desde 2011 la Cátedra Humboldt en el Colegio de México.
Como si se hubieran puesto de acuerdo, tanto la oficialista como el aspirante de la izquierda, reprocharon al puntero Peña Nieto su gestión como gobernador del Estado de México. "Vienen con la navaja muy afilada“, dijo el candidato priísta que aventaja a Vázquez Mota por unos 20 puntos porcentuales.
La aspirante panista acusó a Peña Nieto de haber convertido al Estado de México durante su gestión en una de las entidades más bajas en competitividad . También recriminó que políticos de su partido estaban involucrados en actos de corrupción. Por su parte el izquierdista López Obrador recriminó al exgobernador de 45 años de ser favorecido por las televisoras privadas, particularmente Televisa, empresa a la que, según el candidato del PRD, Peña Nieto otorgó un contrato millonario durante su primer año de gobierno en el Estado de México (2005-2011).
Formato acartonado
"Fue un intercambio de acusaciones mutuas sin ninguna moderación como nosotros conocemos este tipo de debates en Alemania“, comentó Maihold, haciendo alusión a que la moderadora, Lupita Juárez, en ningún momento pudo impedir que el candidato izquierdista, López Obrador, interrumpiera su guión y respondiera lo que se le preguntaba.
El formato diseñado por el Instituto Federal Electoral (IFE), de dos horas de duración, fue abierto con la ofensiva de Peña Nieto que señaló que los dos sexenios panistas han tenido el peor desempeño económico de los últimos 80 años, el cual, afirmó, ha empujado a 12 millones de personas a la pobreza extrema. Pero la ofensiva pronto fue respondida por ataques de sus adversarios.
Entre los temas claves como el energético, Peña Nieto anunció que su intención no es privatizar la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), sino que su intención es modernizarla. „En su campaña el candidato se ha comprometido en que habrá participación privada en las inversiones en Pemex, que indica que podrían abrirse obstáculos que podrían desbloquear ciertas decisiones en México“, afirma Maihold.
El experto aclara: "No me pareció una presentación estelar la de Peña Nieto, pero digamos que estuvo en los niveles que pueden esperarse de un candidato presidencial. No fue el desastre que muchos predecían, que criticaban que no podía decir tres palabras, pero tampoco fue una presentación que dejar muy claro que ahí hay un candidato que domina todos los temas“, afirma Maihold.
El candidato de izquierda, López Obrador, advirtió que de llegar a la presidencia democratizaría los medios de comunicación a los que dijo "no les conviene que la gente sepa quien es realmente Enrique Peña Nieto", a lo que el candidato priísta respondió: "Si las televisoras hicieran presidentes, López Obrador sería mandatario pues destinó mil millones de pesos siendo gobernador de la Ciudad de México al rubro de comunicación social".
AMLO: en la trampa del pasado
Sobre el candidato izquierdista Maihold asegura que sus críticas a los grupos de poder son muy conocidas. "Daba la impresión de no haber digerido realmente su derrota en 2006. Esto redujo su posicionamiento como una fuerza alternativa. Al final hizo una serie de anuncios y compromisos pero no quedó claro cómo le haría para financiarlos", señala el experto.
"A Josefina la veo muy estancada. No logró trascender. Se encuentra bajo presión porque no ha despegado su campaña y muchos observadores tienen la impresión de que este debate era su última oportunidad para evitar el tener que debatirse con López Obrador por el segundo puesto. Mi impresión es que no despegó, porque todas sus intervenciones daban la sensación de estar muy estudiadas a pesar de sus esfuerzos por dirigirse a la población. La candidata no parece ella misma“, dijo.
El candidato del Partido Nueva Alianza (Panal) Gabriel Quadri, quedó fuera del blanco de las críticas, ni siquiera se le cuestionó su vínculo con la fundadora del partido, la controvertida lideresa del sindicato de maestros SNTE, Elba Esther Gordillo. "Eso me sorprendió, que ningún candidato lo interpeló ante esta situación, ni siquiera en el tema de la educación. Las figuras detrás del candidato quedaron sin mucha visibilidad y así quedó con el campo abierto“.
Autora: Eva Usi
Editor: Enrique López