España pide a Cuba la liberación de todos los presos políticos
20 de enero de 2012
La vicepresidenta primera, Soraya Sáenz de Santamaría, expresó la "consternación y condolencias" del Ejecutivo de Rajoy a la familia y amigos de Villar.
Este "trágico desenlace", dijo en la rueda de prensa posterior al consejo de ministros, lleva al Ejecutivo a pedir la libertad de los presos políticos cubanos.
Villar, de 31 años, fue detenido el pasado 14 de noviembre y empezó una huelga de hambre en prisión. El opositor pertenecía a la agrupación Unión Patriótica de Cuba, según dijo el también opositor Elizardo Sánchez, presidente de la ilegal pero tolerada Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional. El régimen castrista no permite otras formaciones políticas excepto el Partido Comunista de Cuba.
En las primeras palabras del gobierno de Rajoy hacia Cuba desde su llegada al poder, en diciembre, Sáenz de Santamaría advirtió al régimen de Raúl Castro de que la política de España con la isla siempre se guiará por "un principio básico e inspirador": el de la defensa de los derechos humanos y de la libertad.
El gobierno de Rajoy, añadió su vicepresidenta, trabajará dentro de la Unión Europea (UE) por "la reconciliación y la concordia" y por "un futuro esperanzador para los demócratas cubanos".
La “Posición Común” y la política exterior española
En 1996 y por iniciativa del entonces presidente del gobierno español, José María Aznar, la UE adoptó la llamada "Posición Común" con respecto a Cuba, que condiciona las relaciones con la isla a cambios en materia de democracia y derechos humanos.
La cooperación quedó suspendida en 2003, después de que 75 activistas opositores fueran detenidos y condenados a penas de hasta 28 años de prisión bajo la acusación de ser "mercenarios" de Estados Unidos.
Los últimos presos de la llamada "primavera negra" que seguían entre rejas fueron excarcelados entre el verano de 2010 y principios de 2011, en el marco de un diálogo entre Raúl Castro y la Iglesia Católica cubana apoyado por el gobierno socialista español de José Luis Rodríguez Zapatero. En el marco de dicho proceso quedaron libres 126 reclusos considerados presos políticos, 114 de los cuales se exiliaron en España.
Después de años de acercamiento por parte del gobierno de Zapatero, la política respecto a Cuba podría suponer uno de los cambios principales en la actuación exterior española con la llegada de Rajoy a La Moncloa. En el pasado, dirigentes de su Partido Popular (PP) han insistido en la necesidad de mantener la "posición común" europea frente a Cuba, que el gobierno de Zapatero trató sin éxito de eliminar o suavizar.
Más de 50 días de huelga de hambre
El disidente cubano Wilmar Villar murió en un hospital en el sur del país tras más de 50 días en huelga de hambre en protesta por su detención, informaron fuentes opositoras.
Villar, de 31 años, murió en un hospital en Santiago de Cuba tras 56 días de ayuno, citó en la noche del jueves la bloguera disidente Yoani Sánchez a la esposa del fallecido, Maritza. Villar había sufrido antes una neumonía en la cárcel después de su detención el pasado 14 de noviembre.
También el opositor Elizardo Sánchez, presidente de la ilegal pero tolerada Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), reportó la muerte del disidente.
Villar fue detenido el pasado 14 de noviembre y empezó la huelga de hambre el 24 tras ser condenado a cuatro años de prisión por "desacato y resistencia a la autoridad". El opositor, perteneciente a la agrupación Unión Patriótica de Cuba según la CCDHRN, había participado antes en una marcha antigubernamental.
La disidencia comparó el caso al de Orlando Zapata, que murió en 2003 en un hospital de La Habana a los 42 años tras una huelga de hambre de 85 días.
El gobierno cubano niega la existencia de presos políticos en la isla y califica a los disidentes de "mercenarios" financiados por Estados Unidos, su adversario ideológico. El régimen castrista acusaba a Orlando Zapata de delincuencia común. La organización Amnistía Internacional lo consideraba un preso de conciencia.
dpa
Editor: Pablo Kummetz