Canadá indemnizará a niños indígenas adoptados forzosamente
6 de octubre de 2017El Estado canadiense empieza a pagar su deuda histórica con lo que allí llaman "primeras naciones”. Ottawa ha acordado pagar indemnizaciones los miles de niños indígenas, hoy adultos, que fueron forzosamente separados de sus comunidades y adoptados por familias no indígenas. Así lo anunció este viernes (06.10.2017) la ministra canadiense de Asuntos Indígenas, Carolyn Bennett.
A estos menores se les arrebató su identidad cultural cuando los servicios sociales dedicados a la infancia los separaron de sus familias durante las décadas de los sesenta, setenta y ochenta del siglo pasado. Muchos de ellos perdieron consecuentemente el contacto con su cultura y su idioma.
Unas 20.000 personas recibirán la compensación estatal, la cual consistirá en una cantidad total de 750 millones de dólares canadienses (596 millones de dólares estadounidenses) que se repartirá entre todos los beneficiarios. Todavía no se ha concretado la cantidad individual. Muchos de los afectados han manifestado que esperan recibir alrededor de 50.000 dólares canadienses cada uno.
Una de las principales demandantes cuya batalla ha terminado en este arreglo, Marcia Brown Martel, que fue separada de su familia por servicios sociales y adoptada forzosamente por una familia no indígena, llamó a estos casos "robos de niños”. Brown Martel, que pasó por el servicio de acogida y sufrió abusos emocionales, físicos y sexuales, manifestó esperanzas en que, tras esta victoria, "esto no vuelva a pasar nunca más en Canadá”.
Un acuerdo para muchos "decepcionante"
Otra de las víctimas, Colleen Cardinal, relató a AP episodios de abusos sexuales por parte de su padre adoptivo y afirmó que se intentó "asimilar a nuestro pueblo en la cultura dominante”. Para ella, la indemnización es insuficiente: "Es bastante decepcionante. Es bastante baja”.
El Tribunal Superior de la provincia de Ontario, la principal del país, dictaminó en marzo contra el Gobierno canadiense por el llamado "Saqueo de los Sesenta", como se conoce popularmente la política de extracción de menores indígenas, y dio la razón a los demandantes.
El acuerdo de partes también incluye una cantidad de 50 millones de dólares canadienses que serán destinados a una fundación para la reparación y la reconciliación.
EAL (ap, efe)