Una cárcel de periodistas
21 de octubre de 2003Una pregunta más: ¿Qué semejanza hay entre guerreros talibanes y periodistas cubanos? Ambos se encuentran encadenados en la isla caribeña. Con lo que podría concluirse que la isla es una cárcel. Falsa conclusión, aun cuando Cuba se lleve el triste título y se sitúe a la cabeza de aquellos países que persiguen y encierran sistemáticamente a aquellos periodistas que se atrevan a criticar al régimen gobernante. Con 26 periodistas encarcelados, Cuba es "la mayor cárcel de periodistas del mundo", según el más reciente informe presentado por la organización Reporteros sin Fronteras.
Según un estudio sobre la libertad de los medios de comunicación en 164 naciones, a Cuba y Corea del Norte, le siguen de cerca Laos, China, Vietnam, Irán, Turkmenistán, en la lista de mayor represión de los medios de comunicación. En todos estos países los medios están sujetos a un duro control estatal. Los periodistas que no acatan el dictamen de las autoridades corren el peligro de ser apresados o se ven obligados a huir al extranjero, según constata el segundo reporte de este tipo presentado por Reporteros sin Fronteras.
EEUU e Israel no son sábanas blancas
Pero no sólo Cuba y los países asiáticos citados salen mal parados. También aunque un poco más abajo en la lista aparecen los nombres de Estados Unidos e Israel. La libertad de prensa se vio fuertemente perjudicada en Estados Unidos a causa de "los enfrentamientos militares fuera de la zona nacional", léase, la más reciente guerra en Irak. Aquí el Departamento de Defensa estadounidense desarrolló la criticable estrategia de seleccionar a los periodistas "invitados" a dar seguimiento "controlado" a los éxitos y fracasos en el campo militar. En el caso de Israel el talón de Aquiles de la libertad de prensa lo representa el trato dado por el ejército israelí a los periodistas en los territorios ocupados.
La Vieja Europa es un bastión
Hay cosas que no cambian, por suerte. Lo mismo que en el reporte previo, son cuatro naciones europeas las que cuentan con un respeto ejemplar de la libertad de prensa. A la cabeza Finlandia, seguida de Islandia, Noruega y Holanda. Pero lo que vale para los países más fríos del continente no es extensible para Italia o España. El fuerte conflicto de intereses que caracteriza la relación entre los medios y el primer Ministro italiano y zar de la comunicación, Silvio Berlusconi, hace que su país ocupe sólo un mediocre nivel en la lista de Reporteros sin Fronteras. Lo mismo pero por razones distintas, sucede en el caso español, en donde las precarias condiciones de trabajo de los periodistas en el País Vasco perjudican la libertad de prensa de la nación.
Para el estudio se investigó en 164 naciones, en donde se entrevistó a periodistas, científicos, abogados y defensores de los derechos humanos sobre la situación de los medios entre septiembre del 2002 y septiembre del 2003.