UE posbrexit: "cambiar o morir"
5 de julio de 2016Los parlamentarios europeos debatieron, por segunda vez en una semana, sobre las consecuencias del brexit y la pendiente salida de Gran Bretaña de la Unión Europea (UE). "No repetiré todo lo que ya se ha dicho", dijo el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.
Hace una semana, el líder del Partido de la Independencia de Gran Bretaña (UKIP), Nigel Farage, aún celebraba su triunfo. Pero, esta vez, se ausentó del pleno tras haber anunciado la víspera su retirada del mando de su partido. "Los héroes de ayer son los tristes héroes de hoy", fue el comentario de Juncker sobre el principal defensor del brexit.
El líder de los liberales en el Parlamento Europeo, Guy Verhofstadt, lo formuló más drásticamente: "¡Las ratas abandonas el barco que se hunde!" Además, Verhofstadt le reprochó al líder de UKIP seguir cobrando su salario europeo para, como él mismo ha dicho, disfrutar ahora de su vida familiar.
La diputada de izquierdas Gaby Zimmer no sólo tuvo reproches para Farage, sino también para Boris Johnson y David Cameron, los otros dos conservadores británicos que ha renunciado tras el brexit: "Primero construyen un castillo de naipes y luego lo destruyen por pura diversión. Los niños pueden actuar así, los políticos no."
Los británicos quieren negociar
En lugar de Nigel Farage, Paul Nuttall habló por la derecha populista. Rechazó los reproches y exigió negociaciones justas con el Reino Unido sobre libre comercio y acceso al mercado interno de la UE: "No usamos el lenguaje del conflicto", dijo Nuttall, luego de que Juncker recalcara nuevamente que no habrá conversaciones informales, mientras el Gobierno británico no solicite formalmente su salida.
El ministro británico de Exteriores, Philip Hammond, había recomendado iniciar negociaciones informales la próxima semana, pero los Jefes de Estado y de Gobierno de la UE ya rechazaron explícitamente esa posibilidad durante su cumbre de la semana pasada.
Por su parte, el líder parlamentario cristianodemócrata, Manfred Weber, insistió en que Gran Bretaña solo podrá tener acceso al mercado interno de la UE si cumple con sus obligaciones. O sea, si permite la libre circulación de personas y la libertad de establecerse en su territorio. "¿Queremos una Europa en la que los camiones puedan circular libremente, pero los ciudadanos tengan que detenerse ante barreras? ¡No!", subrayó Weber.
La UE tiene que cambiar, pero ¿cómo?
El líder de los liberales, Guy Verhofstadt, insistió en que la UE tiene que cambiar: "Si no, morirá." Según él, no se necesitan más debates sobre profundización, ampliación, velocidades, integración y otros conceptos, pues lo que las personas esperan son mejores y más rápidas soluciones europeas en torno a la migración, la protección de las fronteras o la justicia tributaria.
Mientras los diputados de izquierda exigieron más compromiso social de la UE, los conservadores pidieron que el bloque se concentre en grandes temas: "La UE no tiene que regular cada pequeña porquería", espetó el cristianodemócrata Herbert Reul, quien además criticó las exigencias de relajar la política de austeridad en los estados del sur de la UE: "Eso no tiene nada que ver con el referendo británico."
"Esperar es escandaloso"
Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo (que reúne a los jefes de Estado y de Gobierno) se limitó a señalar que los gobiernos de los Estados miembros necesitan tiempo para reflexionar y volverán a reunirse a mediados de septiembre. Pero la de la izquierda parlamentaria, Gaby Zimmer, tildó esa espera de "escandalosa", pues habría que saber ya, por lo menos, sobre qué se quiere pensar.
En tanto, la jefa del populista Frente Nacional francés, Marine Le Pen, que aspira –tras el brexit− a impulsar también la salida de Francia de la UE, se dijo satisfecha de que los pueblos hayan comenzado a recuperar su soberanía. Y, por ese camino, llegó a la misma conclusión que el liberal belga Guy Verhofstadt: "La UE tiene que cambiar, si no morirá."
Gran Bretaña "colapsa"
Los líderes del Consejo y de la Comisión Europea afirmaron, con optimismo, que la UE continuará funcionando y trabajando pese al brexit: "Me alegra que sigamos profundizando el mercado interno ", dijo Jean-Claude Juncker. Según él, con una ampliación de su fondo de inversiones, la UE ayudará a crear más empleo y crecimiento a largo plazo.
El panorama pinta menos color rosa para Gran Bretaña, profetizó para concluir el primer ministro holandés Marc Rutte, quien dirigió las sesiones del Consejo Europeo durante este primer semestre: "Gran Bretaña ha colapsado, política y económicamente. Tardará años en volver a levantarse", auguró Rutte, quien lucha en casa con una creciente oposición euroescéptica y quiere evitar, a toda costa, el contagio del virus del brexit en su país (con elecciones el próximo año) y en el resto de la UE.