Crisis griega y "nuevo" ejecutivo europeo
10 de febrero de 2010The Times, de Londres: "Las bolsas y el euro han caído dramáticamente durante el pasado mes. El motivo está en la crisis provocada por el endeudamiento en el sur de Europa. Los inversionistas temen que Grecia no pueda devolver sus préstamos. Están preocupados también por el gran déficit presupuestario en España y Portugal (…) Una operación de rescate para Grecia sería políticamente complicada, cara y sentaría un terrible precedente (…) Nadie ha obligado a Grecia a endeudarse. El gobierno anterior, perdedor en las elecciones de octubre, indicó un déficit presupuestario demasiado bajo. Un rescate significaría en realidad hacer pagar a los contribuyentes de otros países de la zona euro por decisiones irresponsables sobre las que ellos no han tenido influencia alguna".
"Contrato social" a la Putin
En Viena, el rotativo liberal Die Presse enfoca hacia Rusia: "El gobierno se ocupa de que no les falte el plato de comida y que el nivel de vida se eleve continuadamente, mientras ustedes se abstienen de hacer política y se aguantan la boca. Este es, formulado burdamente, el contrato social extraoficial que el hombre fuerte de Rusia, Vladimir Putin, selló con el pueblo. En los años del boom que siguieron al 2000 funcionó bien. Sólo que a inicios de 2005 ocurrió un 'accidente laboral' cuando Putin pretendió retirar, a unos 40 millones de ciudadanos, subsidios aún provenientes de la época soviética. Luego de una ola de protestas el gobierno retrocedió a toda velocidad (…) Entonces vino la crisis económica y financiera internacional y se hizo difícil para Moscú cumplir su parte del 'contrato' (…) Negligencias del gobierno de Putin, como la de haberse preocupado sólo por el desarrollo de las grandes ciudades y no de todo el país, podrían volverse ahora en su contra".
Comisión europea: menos discurso y más acción
Sobre el recién elegido colegio de comisarios europeos hace notar en Alemania el Frankfurter Allgemeine Zeitung: "Para Barroso, el presidente de la Comisión, es el segundo período de mandato, una confirmación o un voto de confianza que sólo se le había concedido a dos de sus antecesores, Walter Hallstein y Jacques Delors. ¿Cómo aprovechará él los próximos cinco años? Durante su primer mandato estuvo muy preocupado por agradar, sobre todo a los jefes de gobierno de los principales estados miembros. ¿Será más fácil reconocer su propio sello durante el segundo período? En su discurso frente al Parlamento, Barroso instó a superar con 'audacia' el extendido 'pesimismo' en torno al proyecto europeo. Ciertamente bastaría con que la Comisión se preocupe menos por grandes discursos, se concentre en grandes tareas como la superación de la crisis financiera, y demuestre con ello que esta institución europea sirve también a los ciudadanos".
¿Todos contentos?
Dresdner Neueste Nachrichten, de Dresde: "Así quedaron todos tremendamente contentos: Barroso, el presidente de la Comisión, por haber superado las molestas reverencias frente al Parlamento; su tropa, porque (con la excepción de una inadecuada búlgara) nadie quedó en el camino durante el proceso de prueba; los parlamentarios, por haberle mostrado al portugués cuán en serio debe tomarlos. La alegría no es, sin embargo, suficientemente amplia. El modo en que ha sido sorteado el proceso no resulta alentador para lo que queda por delante. Al final de la larga transición hacia un nuevo orden jurídico y la renovación de sus directivos, la UE continúa sin estar realmente mejor ordenada".
Autor: RML/AFP/dpa
Editor: Emilia Rojas-Sasse