Terribles y humillantes
10 de mayo de 2004El ministro alemán de Exteriores exigió el castigo de los soldados estadounidenses responsables del "terrible y repugnante" maltrato de presos iraquíes. "Los responsables de esta humillación y abuso deben ser investigados y castigados", manifestó Fischer aludiendo al escándalo provocado por los abusos sistemáticos con los prisioneros, a manos de los militares estadounidenses destinados en Irak.
Fuentes del ministerio aseguraron que la práctica de tortura en las cárceles iraquíes bajo custodia de Estados Unidos será el tema de las conversaciones con el secretario de Estado Colin Powell, a las que se sumará la asesora para Asuntos de Seguridad, Condoleezza Rice. Los abusos y vejaciones que efectivos estadounidenses y británicos cometieron con los presos en Irak provocaron la repulsa de la opinión pública y de la clase política alemana.
Críticas generalizadas: Irak y Guantánamo
El partido de Los Verdes, al que pertenece Fischer, exhortó a las autoridades estadounidenses a ser más ofensivas en el esclarecimiento de los casos de tortura en las cárceles iraquíes. "La administración Bush no puede limitarse a pedir disculpas, sino que debe asumir responsabilidades políticas", dijo la copresidenta de Los Verdes, Angelika Beer, tras una reunión de la ejecutiva. Beer explicó que exigir responsabilidad no equivale a pedir la dimisión del secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, sino a "recuperar la confianza y el respeto en el mundo árabe, con acciones de derecho como sería el reconocimiento del Tribunal Penal Internacional".
También el ministro del Interior alemán, Otto Schily, que actualmente se encuentra en Washington en una reunión sobre justicia y seguridad preparatoria para la próxima cumbre del G8, criticó duramente el comportamiento de las tropas de la coalición en Irak, calificándolo como "un duro golpe a las fuerzas de la coalición y la lucha contra el terrorismo". La ministra alemana de Justicia , Brigitte Zypries, que acompaña a Schily en Washington, exigió a EE.UU, que la guerra contra el terrorismo se lleve a cabo dentro de los cauces legales previstos por las leyes internacionales.
La mayoría de los partidos políticos en Alemania criticaron los abusos de los militares en la prisión iraquí de Abu Ghoreib. Entre ellos, Guido Westerwelle, presidente del Partido liberal (FDP), recalcó la importancia de que Fischer sea directo con sus colegas estadounidenses manifestando la desaprobación de los alemanes ante estos abusos.
Schily aludió también a los prisioneros de la Bahía de Guantánamo: "La categoría de combatientes enemigos en la que están incluidos actualmente los presos de Guantánamo es inaceptable". Con esta calificación, el gobierno estadounidense negó a los 600 reclusos la asistencia legal de un abogado y la competencia de los tribunales estadounidenses.
Condenas con diplomacia
Sin embargo y pese al escándalo que las torturas han provocado en Alemania, el ministro Fischer podría mostrarse reacio a criticar duramente al gobierno de Estados Unidos. Su visita se produce tan sólo dos meses después de que Canciller alemán Gerhard Schröder fuese invitado a la Casa Blanca para retomar las relaciones con EE.UU, tras las diferencias surgidas entre ambos a raíz de la guerra de Irak.
Además de los casos de tortura, Fischer tratará también otros temas como la formación del gobierno de transición en Irak y el papel que desempeñarán las Naciones Unidas. Alemania reclama junto a Francia, un papel protagonista para esa organización en Irak, tanto en el terreno político como en cuanto a la reconstrucción.
Fischer planea además discutir con la asesora de seguridad Condolezza Rice, las materias que tratarán en la próxima cumbre de junio en Berlín, en la que volverán a encontrarse ambos dirigentes.