Se define el relevo de Annan en secretaría de Naciones Unidas

La nominación emitida hoy por parte del Consejo de Seguridad no es el último paso formal. Sin embargo, da un impulso irreversible a la candidatura de Ban Ki-moon para la Secretaría General de la Organización de las Naciones Unidas. El Ministro de Asuntos Exteriores de Corea del Sur era de hecho el único candidato para suceder a Kofi Annan.

El panorama era tan claro en favor de Ban, que todos los demás aspirantes habían retirado sus respectivas candidaturas. En varias rondas preliminares, el sudcoreano había obtenido una abrumadora mayoría de los votos posibles. Por si fuera poco, la necesidad de presentar un contrapeso a las ambiciones nucleares de Corea del Norte vino a catapultar aún más las posibilidades del candidato. Tras la nominación de hoy, a Ban Ki-moon le resta solamente un paso para convertirse formalmente en el proximo Secretario General de la ONU: la votación en la Asamblea General, en la cual participarán 192 países, y que se llevará a cabo a finales del presente mes.

Con el amplio margen de maniobra que lo precede, Ban Ki-moon ha dado a conocer algunas directrices de lo que será su gestión al frente del máximo organismo multinacional. Sin dejar mucho lugar a dudas, ha señalado que se comprometerá de manera vehemente en el proceso de reformas a la ONU. Ha dicho, entre otras cosas, que el organismo “debe ser más eficaz y relevante” en la solución de problemas como el terrorismo, la proliferación de armas de destrucción masiva y el deterioro del medio ambiente.

Perfil conciliador

Del mismo modo, el aún Ministro de Asuntos Exteriores de Corea del Sur ha dicho que la ONU debe jugar un papel más visible en conflictos como el de Medio Oriente. En cuanto a Corea del Norte, ha admitido que una de sus prioridades será contribuir a la solución del diferendo entre los gobiernos de Seúl y de Pyongyang. Se le conoce, además, como un promotor de buenas relaciones con Estados Unidos, hecho que podría redundar en una mejor relación entre Washington y las Naciones Unidas.

Ban ha interpretado el gran consenso en torno suyo como un apoyo a las ideas que pretende impulsar. Sin embargo, ha reconocido que, a diferencia de lo que sucede en las delegaciones nacionales de la ONU, necesita una mayor proyección entre los gobiernos.

¿Un nuevo Pérez de Cuéllar?

Por otra parte, hoy se especula sobre el futuro del actual secretario general, Kofi Annan. Encuestas llevadas a cabo recientemente señalan una preferencia de 30 por ciento para el aún secretario general de la ONU hacia los comicios presidenciales a celebrarse en Ghana, su tierra natal. Aunque falta más de un año para que la votación se realice, los indicadores perfilan una posible victoria electoral de Annan en segunda vuelta.

El Jefe de Estado de Ghana, Jon Kufuor, ha dicho que la gestión del actual secretario general de la ONU ha llenado de honor a esa nación, y la ha puesto en una posición más favorable dentro de la comunidad internacional. El futuro dirá si Annan corre mejor suerte que otro Secretario General, el peruano Javier Pérez de Cuéllar, quien luego de salir de la ONU intentó sin éxito alcanzar la presidencia de su país, en 1995.