Premio Nobel Alternativo: una instancia moral
14 de septiembre de 2010La idea del Premio Nobel Alternativo fue del editor alemán-sueco Jacob von Uexkull. Inspirado por la última voluntad de Alfred Nobel de dar respuestas a las preguntas más urgentes de la humanidad, von Uexkull donó a finales de los años 70 un millón de dólares de su fortuna privada para enaltecer el compromiso de individuos y organizaciones contra el deterioro del medio ambiente, la violación de los derechos humanos y el subdesarrollo. Desde 1980, se otorgan en diciembre tres premios de 50.000 euros cada uno.
Originalmente, von Uexkull trató de convencer al Comité del Premio Nobel de otro Premio Nobel "oficial" para la protección del medio ambiente. "Como yo crecí en Suecia, también sabía que si se recibe un Premio Nobel entonces se es tomado en serio en todo el mundo, también en otras áreas, y éste fue el incentivo", recuerda el donante. Sin embargo, el Comité del Premio Nobel rechazó amablemente la idea. Por ello, von Uexkull creó la Fundación Right Livelihood Award.
El jurado imparcial de este Nobel “alternativo”, compuesto por personalidades y activistas de todos los continentes del mundo, es responsable del análisis de los candidatos y de la adjudicación del premio. A diferencia del premio oficial, el Nobel “alternativo” no se circunscribe en primera línea sólo a resultados en el área científica, sino también al compromiso activo y a un estilo de vida ejemplar.
Paz, medio ambiente y equidad social
No es raro que los ganadores provengan de países en desarrollo. "Nuestros galardonados y candidatos al premio y los miembros de nuestro jurado son a menudo personas que viven allí, en los lugares de pobreza, en los barrios marginados, afuera en el campo", dice von Uexkull. Así como el teólogo de la liberación y el ganador del año 2001, Leonardo Boff, que por décadas ha intercedido por los pobres y débiles de América Latina, y que en sus escritos hace referencia sobre la relación entre espiritualidad, justicia social y responsabilidad ambiental.
Contrario del Nobel oficial, cuyo ganador proviene por lo general de Europa o Estados Unidos, el 40% de los galardonados con el Premio Nobel Alternativo son de Asia o África. Muchos de ellos eran desconocidos por el público internacional antes de recibir este premio, como Roy Seseña quien fue honrado en 2005 por su compromiso con el pueblo nómada bosquimano del desierto del Kalahari en Botswana.
Más participación femenina, joven y de todo el mundo
Los hasta ahora 137 galardonados con el Nobel Alternativo provienen de 58 naciones, aunque no todos son de países emergentes. En promedio son cada vez más jóvenes y cada vez más mujeres reciben este premio.
Una de ellas es la médica alemana de Colonia, Monika Hauser, que recibió el galardón en 2008 por su organización "Medica mondiale" para mujeres violadas y otras víctimas de violencia sexual de guerras civiles, sobre todo de los Balcanes. La ginecóloga Hauser se sintió honrada por esta distinción especialmente “porque este premio se trata principalmente de reconocer alternativas sociales y organizaciones que han brindado una alternativa y un cambio en este mundo”. "Medica mondiale" obtuvo un año después del Premio Nobel Alternativo más del doble de donaciones que en los años anteriores.
Prestigio internacional, apoyo moral y material
Gracias al Premio Nobel Alternativo otros galardonados fueron protegidos de represiones de organizaciones estatales e incluso de ir a la cárcel. Otros, como el biólogo y conservacionista de Alemania Oriental, Michael Succow, se vieron animados moralmente por su compromiso. "Es tal vez el premio más importante que un ciudadano del mundo reciba de parte de los ciudadanos del mundo. No es un Nobel normal como el oficial, que aporta un poco más al progreso científico y a superar a la naturaleza, sin un premio por pensar en lo que podemos hacer de manera diferente”, dijo Succow luego de la ceremonia de entrega.
Si al comienzo el Premio Nobel Alternativo fue ridiculizado como una propuesta de un idealista, actualmente es una autoridad moral aceptada en todo el mundo. Su creciente renombre internacional también se refleja en el hecho de que desde 1985 se otorga en el Parlamento sueco. Una de las galardonadas, la activista keniana medioambiental Wangari Maathei, logró incluso después de ser reconocida en 1984 con el Premio Nobel Alternativo, de recibir en el 2004 el Premio Nobel oficial. Éste es un caso único en la historia de los 30 años del Premio Nobel Alternativo, pero una señal infalible de su relevancia para el mundo.
Autor: Daniel Scheschkewitz / Cristina Mendoza Weber
Editor: José Ospina Valencia