"No es una intromisión en los asuntos de México"
26 de agosto de 2015El abogado y político socialdemócrata (SPD) alemán Christoph Strässer, cuenta con una larga trayectoria en materia de Derechos Humanos en su partido, del que fue portavoz del grupo legislativo desde 2005. En enero de 2014 fue designado Comisionado de Derechos Humanos y Ayuda Humanitaria del Gobierno alemán. Strässer y el embajador de Alemania en México, Viktor Elbling, se reunieron en febrero pasado con los padres de familia de los 43 alumnos de Ayotzinapa desaparecidos tras los violentos sucesos de fines de septiembre pasado en Iguala. En la escuela normal Raúl Isidro Burgos, Strässer pidió una disculpa a título personal ante la posibilidad de que en esos crímenes hayan sido utilizadas armas alemanas. Desde entonces, Strässer sigue con atención la situación en México. Prueba de ello es su reciente post en su página de Facebook en la que se solidariza con una carta pública enviada por la familia del periodista Rubén Espinosa a las autoridades mexicanas y se suma a la petición de que esos abominables crímenes, así como el móvil, sean aclarados a fondo. Strässer advierte que la representación diplomática de Alemania en México seguirá con mucha atención las investigaciones en torno al multihomicidio cometido el pasado 31 de julio y se compromete a continuar el diálogo con México en materia de Derechos Humanos.
Deutsche Welle: La familia del fotoperiodista asesinado, Rubén Espinosa, duda de las investigaciones de la Justicia mexicana en el caso del multihomicidio cometido el 31 de julio pasado. Usted visitó Mexico en febrero pasado y reportó que sus interlocutores le mostraron los numerosos instrumentos legales para indagar casos como éste. ¿Cuál es el problema en la investigación de estos crímenes?
Christoph Strässer: México cuenta con regulaciones e instrumentos legales internacionalmente reconocidos, sin embargo, y ésa fue la conclusión a la que llegué durante mi viaje a México, a nivel regional falla la implementación de estas leyes, así como la investigación, como vemos en el caso del periodista recientemente asesinado. Sólo se puede especular sobre la voluntad política que hay detrás. En todo caso la constatación de que hay una deficiente investigación en este tipo de crímenes y agresiones es objetiva, y no hay duda en ello.
Tanto miembros del Ejército como la policía actúan a menudo de manera arbitraria y hay acusaciones de violación de los derechos humanos. Pese a la grave situación, la industria de armamento alemana tiene gran interés en exportar sus productos. Cuando estuvo usted en México anunció que investigaría la situación en materia de exportación de armas. ¿Hay alguna novedad?
No hay novedades a nivel político. Según mis averigüaciones sigue habiendo una prohibición de exportación de armas hasta que se aclare el asunto ante el Tribunal regional de Stuttgart (por el caso de los fusiles G36 Heckler & Koch exportados ilegalmente) y particularmente teniendo en cuenta los acontecimientos en torno a los estudiantes del magisterio desparecidos de Ayotzinapa. Hasta donde yo sé hay una suspensión de las exportaciones de armas a México.
Desde el año 2000 han sido asesinados en México 88 periodistas. Más del 90% de los casos no ha sido esclarecido. ¿Es un país como México, en donde campea la corrupción política, un socio de credibilidad para Alemania?
Continuaremos la cooperación con México precisamente para mejorar esta situación. Hay una amplia y diversa oferta en la cooperación bilateral para fortalecer el Estado de Derecho. Entre ellas, medidas concretas que pueden implementarse para que las investigaciones criminales y el procesamiento de este tipo de casos se lleven a cabo. Muchos en México dudan de que el Gobierno central, que delega muchos asuntos a nivel regional y municipal, tenga la voluntad política para implementar todas estas leyes. O que esté en condiciones de hacerlo. Ambas opciones me parecen sumamente graves. En el segundo caso se puede ayudar, considero que no sería atinado interrumpir el diálogo en este momento. Al contrario, los casos de esos 88 periodistas asesinados tienen que mantenerse en la agenda del día. Nuestra embajada en México está muy activa precisamente en el caso del asesinato del periodista Rubén Espinosa y de las otras cuatro mujeres que se encontraban con él.
Alemania prepara un Acuerdo de Seguridad con México. ¿No cree usted que semejante acuerdo legitima a un Gobierno al que en los hechos se le critica una dudosa política en materia de Derechos Humanos?
Hasta donde yo sé ninguna de las partes sigue de manera activa el avance de este acuerdo y yo he dicho en repetidas ocasiones que soy de la opinión de que un tratado como éste sólo puede ser llevado a buen término siempre y cuando contenga una clara formulación en cuanto a los estándares en materia de derechos humanos, así como de mecanismos de control que registren, por ejemplo, en el caso de agresiones de los cuerpos de seguridad, a qué nivel hay que activar una investigación. En este ámbito sólo puede haber un avance cuando Estados como el alemán esté en contacto con el lado mexicano para tratar de transmitir estos estándares. Si no se puede lograr esto desde un inicio, entonces pienso que hay que suspender las negociaciones.
¿Qué recomendaría usted al Gobierno mexicano para superar la corrupción y el dominio de las bandas criminales?
Es muy difícil hacer recomendaciones desde afuera. Pero creo que hay que hacerle ver al Gobierno mexicano, a través de conversaciones bilaterales y multilaterales, que no se trata de una intromisión en los asuntos internos de México sino que se trata de mantener estándares que el gobierno y el parlamento han aprobado a través de leyes y regulaciones. Y que esto es de interés propio del Gobierno mexicano, incluso considerando los intereses económicos con países como Alemania. Tienen que mantenerse los estándares en materia de derechos humanos, de lo contrario las relaciones bilaterales de México con otros países no mejorarán. Para nosotros los derechos humanos no son una cuestión de escaparate sino que son parte de la política diaria.