La OTAN reforzará sus tropas en Afganistán
9 de febrero de 2006
El encuentro informal de los ministros de Defensa de la OTAN, que tiene lugar en la localidad siciliana de Taormina, había sido concebido para discutir sobre el futuro de la alianza, con un campo de acción global. La discusión teórica, sin embargo, quedó relegada a segundo plano, en vista del desafío que plantean los actuales brotes de violencia detonados por las caricaturas de Mahoma que han publicado varios periódicos europeos. Una violencia con la que se han visto confrontadas directamente las propias fuerzas de la OTAN en territorio afgano.
Más tropas para Afganistán
El secretario general de la Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer, destacó ya al inicio del encuentro que la OTAN no desistirá de sus planes de extender su presencia en Afganistán. Por lo pronto, se prevé enviar cerca de 6000 soldados adicionales, británicos y holandeses, y extender la presencia de esas fuerzas de protección (ISAF) hacia el sur del país. Según el jefe de la organización, tampoco está en tela de juicio la inclusión de aproximadamente 300 soldados daneses en esa misión.
En una etapa posterior, la alianza también podría emplazar tropas en la zona oriental afgana, donde unos 18 mil efectivos estadounidenses participan en la operación "Enduring Freedom", dirigida a combatir el terrorismo. De Hoop Schäfer admitió que aún no puede adelantar cuándo se tomará una decisión al respecto pero, desde ya, aclaró que "ISAF y Enduring Freedom seguirán siendo operaciones separadas, en las que sin embargo habrá efectos de sinergia".
El papel de la OTAN
El tema de Afganistán, que se adelantó en el orden del día, es sintomático de la discusión que se viene desarrollando desde hace algún tiempo en la Alianza Atlántica. Mientras Estados Unidos quisiera ver a la organización defensiva occidental más directamente involucrada en el combate contra el terrorismo internacional y en los focos de crisis del mundo, los socios europeos prefieren la cautela. Otro botón de muestra: diplomáticos estadounidenses podrían imaginar a las tropas de la OTAN actuando para hacer cumplir las sanciones que la ONU pudiera dictar contra Irán, debido a su programa nuclear. Algo que a los europeos todavía ni se les pasa por la mente. Como lo hizo notar el ministro de Defensa alemán, Franz Josef Jung, "eso no está a debate. Lo que ahora queremos es el éxito diplomático" con Irán.
El ministro alemán apuesta pues a reducir las tensiones. Lo mismo vale para el tema de la crisis desatada por las caricaturas de Mahona, cuyas manifestaciones violentas son producto de una acción concertada, a juicio de Jung. Ahora urge buscar fórmulas para superarla y de eso se discutirá este viernes en Taormina, cuando los ministros de Defensa de la OTAN se reúnan por primera vez con sus homólogos de siete países ribereños del Mediterráneo, entre ellos los de Israel, Egipto, Jordania y Argelia.