Europa llama a reactivar el plan de paz, tras la muerte de Arafat
11 de noviembre de 2004Condolencias del mundo entero recibió el pueblo palestino esta mañana, al conocerse la noticia de la muerte de Yasser Arafat. Los largos días de su agonía llegaron a su fin, poniendo término también a toda una era en el Medio Oriente. Así lo destacaron diversos gobernantes, recordando el papel clave que desempeñó para el reconocimiento internacional del derecho palestino a la autodeterminación.
Fischer aboga por prontas elecciones
Mientras se ponían en marcha los preparativos para el sepelio, en diversas capitales europeas se hizo hincapié en la necesidad de reactivar el proceso de paz. El canciller alemán, Gerhard Schröder, lamentó que Arafat no haya podido ver consumada la obra de su vida, que dedicó a luchar por un estado palestino soberano. El ministro de Relaciones Exteriores alemán, Joschka Fischer, quien asistirá a los funerales, envió también su pésame, señalando que ahora “hay que hacer todo lo necesario para lograr un traspaso ordenado del poder”. En este contexto subrayó la importancia de la pronta celebración de elecciones, que brinden legitimidad a la nueva cúpula palestina.
Por su parte, el presidente francés, Jacques Chirac exhortó a poner en marcha el plan de paz conocido como la “hoja de ruta”, recordando que éste también fue aprobado por Arafat. “Francia, al igual que sus socios de la Unión Europea, seguirá trabajando, con convicción y determinación, para que haya dos estados -un estado palestino libre y democrático y el estado de Israel- que puedan coexistir en paz y seguridad”, aseveró el mandatario galo. Igualmente conminó a los palestinos a la cohesión en esta hora de dolor, puntualizando: “Al permanecer unidos, se mantendrán fieles a la memoria de Yasser Arafat y darán expresión al ideal al que dedicó su vida.”
El papel de Washington
También el primer británico, Tony Blair, expresó su voluntad de luchar incansablemente por un estado palestino, que pueda subsistir junto a Israel. “La paz en el Medio Oriente debe tener máxima prioridad para la comunidad internacional”, recalcó el jefe del gobierno de Londres, antes de partir hacia Washington para efectuar la primera visita de un gobernante europeo al presidente estadounidense tras su reelección. Buena ocasión para convencer de la necesidad de actuar a George W. Bush, quien calificó la muerte de Arafat como “un momento significativo” en la historia del pueblo palestino.
Algunos observadores estiman que, efectivamente, el deceso del jefe de la OLP podría marcar una cesura. Por ejemplo, el delegado general palestino en Alemania, Abdallah Frangi, considera que Estados Unidos podría estar ahora más dispuesto a impulsar el proceso de reconciliación en el Medio Oriente. Desde ya, el ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Silvan Schalom, se mostró proclive al restablecimiento del diálogo, "si la (nueva) cúpula palestina no respalda el terrorismo". Pero mucho dependerá de lo que pase en las próximas horas. Por lo pronto, no resultan de ayuda declaraciones como las que formuló el ministro israelí de Justicia, Jossef Lapide, en el sentido de que Arafat impulsaba el terrorismo y es “bueno que el mundo se haya liberado de eso”. Y tampoco los anuncios de Hamas de que persistirá en sus actos violentos contra Israel.