UE y FMI al rescate de Irlanda
17 de noviembre de 2010En torno a qué medidas tomar para ayudar a Irlanda en esta actual crisis y cómo convencerla de que acepte solicitar ayuda de los fondos de rescate han conversado los ministros de Finanzas de los 27 países de la UE en Bruselas. Si en un primer momento, Irlanda negaba que fuera pedir ayuda a los socios europeos, después entreabrió la puerta a colaborar con una misión conjunta de la UE y el FMI para determinar qué tipo de asistencia podría recibir; la misión podría empezar su trabajo en las próximas horas.
Finalmente, aunque aún no hay una petición formal, Didier Reynders, ministro belga de Finanzas a la cabeza del Ecofin este semestre, reconoció que los fondos de rescate para Irlanda son inminentes. “No presionamos a Irlanda para que se acoja al mecanismo; sólo repito que está listo y a la disposición por si fuere necesario”, declaro el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.
La situación de Irlanda
Entretanto ha quedado claro que el gobierno irlandés no es el endeudado, sino su banca. Según el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Oli Rehn, la UE está dispuesta y se encuentra ya buscando maneras de apoyar al que fuera el “tigre celta” a salir de esta crisis que afecta a la eurozona y podría arrastrar rápidamente sobre todo a países con finanzas en aprietos como Portugal y España.
Bajo presión, Irlanda ha prometido trabajar junto a la misión conjunta de la UE y el FMI en medidas inmediatas para ayudar a su golpeado sector bancario, un proceso que podría conducir a un rescate financiero que hasta el momento Dublín –que logró en 20 años convertirse, con sus impuestos bajos, en un próspero centro de servicios- se ha negado a pedir.
Se calcula que hasta el año 2014 Irlanda podría necesitar entre 80 y 90 mil millones de euros para sanear sus cuatro bancos principales, por los cuales el Gobierno ha firmado garantías por 350 mil millones de euros. Esto tiene como resultado que el déficit estatal asciende al 32 por ciento del PIB de la isla, es decir, un déficit más de diez veces mayor que el permitido por la UE.
El fondo está previsto
La crisis golpea no sólo a la isla, sino a la eurozona y a Europa entera; el Banco Central Europeo está envuelto en el asunto y bancos de países como Gran Bretaña, Alemania y Francia están entre los acreedores de este pequeño país. Con todo, en marcha está la facilidad financiera temporal pone hasta el 2013 a disposición de los socios del euro con problemas de pagos un fondo de 750.000 millones de euros, provenientes de fondos públicos. 440 mil millones provienen de los socios europeos (120 mil millones sólo de Alemania), 60 mil millones de la Comisión Europea y 250 mil millones del Fondo Monetario Internacional. A los fondos de la facilidad financiera temporal podría sumarse un aporte adicional ofrecido por Gran Bretaña.
No dejar pasar más tiempo
Según analistas alemanes, mientras más tiempo se espera, más caro saldrá el asunto. Irlanda tendrá finalmente que acogerse, debido a su alto endeudamiento, al marco de rescate previsto por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Es una cuestión de días, quizá sólo de horas. Los planes del comisario europeo de Asuntos Monetarios y Financieros están listos.
La inminencia de unas elecciones antes de las cuales el Gobierno irlandés no querría reconocer que se encuentra en quiebra y el temor a las duras condiciones que trae consigo el marco de rescate de los socios europeos y del FMI serían el motivo de la negativa.
Rescate con condiciones
“El eurogrupo ha dicho claramente que las facilidades que elaboramos en la primera mitad de este año están a disposición de todo miembro de la UE, en caso de necesidad. Y las reglas que decidimos entonces tienen validez”, advirtió desde ya el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble. Eso quiere decir, que la UE tiene derecho a inmiscuirse en un futuro programa de austeridad irlandés y también en su sistema impositivo.
En todo caso, Gran Bretaña también está dispuesta a ayudar: “Irlanda es nuestro vecino directo. Es de interés británico que su economía tenga éxito y que podamos contar con un sistema bancario irlandés estable”, declaró George Osborne, ministro británico de Finanzas.
¿Bajo control?
Como fuere, después jornadas de declaraciones angustiantes –como la del presidente de la UE, Herman Van Rompuy, de la que muchos leyeron el ocaso de la eurozona y de la unión-, la canciller alemana Angela Merkel salió al paso con una declaración a la televisora alemana ARD que quiere demostrar que, a pesar de las innegables tormentas, el barco no se encuentra a la deriva:
"No creo que la eurozona esté en riesgo. Pero estamos experimentando sacudidas y situaciones de una clase que no hubiera soñado hace un año y medio". También, después de la reunión de los ministros de Finanzas, los socios se muestran más tranquilos; así, la ministra española de Economía y Hacienda, Elena Salgado, aseguró que Irlanda "es consciente de sus problemas" económicos y por ello tanto España como el resto de socios comunitarios creen que actuará "de forma responsable".
Autora: Mirra Banchón (dpa/efe/rtr/ebs/ep/ae)
Editor: José Ospina Valencia