El SPD busca el ataque
27 de septiembre de 2017
La sala en donde Andrea Nahles acaba de ser elegida nueva jefa del grupo parlamentario del SPD ya se está vaciando. Al salir, Nahles se toma el tiempo para aceptar felicitaciones y responder preguntas. Por ejemplo, si los socialdemócratas alemanes realmente pasarán a la oposición a pesar de poder seguir, técnicamente, en una coalición con el partido conservador (CDU) de Angela Merkel. Por supuesto que sí, asegura Nahles, que abandonó el ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales que había ocupado en la última legislatura.
Adiós a la coalición con la Unión
Según Andrea Nahles, la unión conservadora de CDU y CSU entendió finalmente que el SPD ya no está dispuesto a seguir en la coalición. "Les deseo mucha suerte en el viaje", comentó en tono sarcástico las próximas negociaciones entre la Unión, el partido liberal FDP y los Verdes sobre una coalición, consideradas altamente complicadas.
Nahles quiere que la decisión del SPD no se interprete como retirada, sino como el comienzo de un proceso de renovación. Y también como una oportunidad de atacar duramente: con ataques contra los opositores políticos, incluyendo a la Unión, el SPD quiere da más definición a su perfil antes de que caiga completamente en la insignificancia.
Espíritu de lucha
En el foco de esa estrategia agresiva estará, según Nahles, el nuevo gobierno, y no el partido populista de derechas AFD. Nahles adquirió experiencia como delantera agresiva de su partido en el puesto de secretaria general pero también como ministra cuando tuvo que luchar por la introducción del salario mínimo en Alemania, uno de sus mayores éxitos.
Ahora, Andrea Nahles trata de establecer, junto con el jefe del SPD, Martin Schulz, un espíritu de lucha en el partido y en el grupo parlamentario. La primera tarea es analizar el miserable resultado electoral del 20,5 por ciento. Eso tardará un tiempo, dice Nahles.
La fase de regeneración servirá a poder volver en cuatro años al Gobierno. "No vamos a la oposición para quedarnos en la oposición", asegura Nahles. En su grupo parlamentario, reducido por 40 a 154 diputados, Nahles ya quiere haber detectado un nuevo espíritu de renovación.
Nina Werkhäuser (GG)