EE. UU., el gran ausente en COP23 en Bonn
7 de noviembre de 2017A la ciudad de Bonn, en el oeste de Alemania,llegaron miles de delegados de todo el mundo para participar en la cumbre climática de la ONU.Durante las próximas dos semanas (del 6 al 17 de noviembre), los delgados negociadores elaborarán el "manual de reglas" del Acuerdo sobre protección del clima de París, al que se llegó en 2015 y el cual entró en vigor en 2016.
Las personalidades más sobresalientes llegarán a la COP23 el 15 de noviembre. Pero, en realidad, los representantes de la alta política tienen que estar preparados para una batalla en la que la sociedad civil quiere hablar por los EE. UU.
Donald Trump, el presidente estadounidense, anunció que retirará a su país del Acuerdo de París.Pero eso es un proceso que demorará tres años, y por tanto, EE. UU. permanecerá como país signatario durante ese tiempo. El presidente Trump, sin embargo, envió una pequeña delegación a Bonn que intentará continuar afinando las reglas del acuerdo climático.
El rol que cumplirá esta delegación fue objeto de debate en el primer día de la COP23. Por primera vez, EE. UU. no dispone de un pabellón en la cumbre sobre el clima de la ONU, y es uno de los pocos países desarrollados que no están presentes. Pero un grupo de gobernadores, alcaldes y ejecutivos estadounidenses, llamada "We are still in coalition" (Aún seguimos en coalición), inaugurará el jueves, 8 de noviembre de 2017, el pabellón del "Centro de Acción Climática de EE. UU." en la cumbre. El pabellón está liderado por el gobernador de California, Jerry Brown, y el exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg.
"Es la primera vez que el Gobierno de EE. UU. no quiere contar con un espacio en estas negociaciones ni quiere hablar sobre la historia del activismo por la protección del clima de este país", dijo Lou Leonard, ex vicepresidente del área de Cambio Climático y Energía en la Fundación Vida Silvestre (WWF)."Es decir que las novedades acerca de las acciones para frenar el cambio climático en EE. UU. serán provistas por los empresarios, los gobiernos de las ciudades y estados, que participan en esta conferencia como una delegación unificada, trabajando para acelerar las medidas contra el calentamiento global en la economía estadounidense", subrayó Leonard en entrevista con DW.
¿Quién es el jefe?
Eso significa que habrá dos delegaciones rivales en la cumbre climática de este año, por lo que cabe preguntar: ¿Quién hablará realmente por los Estados Unidos?
"En mi opinión, los delegados subnacionales representan verdaderamente el interés de los estadounidenses, y están más cerca de la opinión pública", dijo a DW Alden Meyer, director estratégico de la Unión de Científicos Preocupados, un grupo que reclama pasos urgentes para frenar el cambio climático, en la COP23 en Bonn. "Pero en lo que respecta a las negociaciones, de acuerdo con nuestro sistema de Gobierno, es el Gobierno Federal el que representa legalmente a EE. UU. en las conversaciones", añadió.
Al no haber una presencia visible de EE. UU. en la COP23 en Bonn, los delegados están divididos en cuanto a enfocarse más en conversaciones con la delegación oficial del Ejecutivo estadounidense, o con los delegados no oficiales. "Esto es una aberración, y sea quien fuere el que tome el poder después de Trump, restaurará la participación de EE. UU. en el Acuerdo de París", asegura Meyer.
Poder y vacío económico
Entretanto, varios países e instituciones financieras se alinean para llenar el vacío dejado por EE. UU. China está ansioso por hacerlo y cuenta con un amplio pabellón en la conferencia de este año, asumiendo un rol más resoluto detrás de escena, de acuerdo con fuentes diplomáticas.
La Unión Europea también se está movilizando: el presidente francés, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel, llegarán a Bonn la próxima semana.
También el compromiso de compañías e instituciones financieras será mayor que nunca, lo cual ya despierta las quejas de diversas ONGs acerca de que el proceso está siendo acaparado por fuertes intereses financieros. Jonathan Taylor, vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones (BEI), dio una conferencia de prensa al inicio de la COP23, en la cual dijo que esa organización registró un enorme repunte del compromiso del sector privado en los últimos meses. El BEI prometió destinar 100.000 millones de euros para proyectos de protección del clima hasta 2020.
Cualquiera fuese la elección de los delegados estadounidenses en la COP23 en Bonn, el resentimiento hacia la decisión del Gobierno de Donald Trump se hace sentir, y es criticada por toda la comunidad internacional. James Hansen, un excientífico de la NASA llamado "el padre de la concientización sobre el cambio climático" debido a sus advertencias tempranas, ya en 1988, ofreció en Bonn una conferencia de prensa en la que criticó fuertemente la decisión estadounidense. Lo hizo acompañado de su nieta, de 18 años, Sophie Kivlehan, quien dijo: "Ustedes, los adultos, dicen que nos aman. Pero los desafío a actuar de acuerdo con sus palabras. Si continúan persiguiendo sus objetivos egoístas, el resultado será un enorme sufrimiento para sus hijos".
Autor: David Keating (CP/VT)