Disturbios en Saint Louis tras la absolución a un policía
16 de septiembre de 2017Cientos de manifestantes se congregaron en las calles de St. Louis el viernes (15.09.2017) para protestar por la absolución por parte de un juez de Missouri de un policía que mató en 2011 a un sospechoso de raza negra. Algunos protagonizaron enfrentamientos con la policía con piedras y botellas, hiriendo a dos agentes, uno de ellos grave, alcanzados por sendos ladrillos.
Las protestas, sin embargo, fueron en general pacíficas, sobre todo hasta que llegó la noche, cuando la mayoría de los manifestantes se retiraron y que quedaron grupúsculos de "agitadores", como los calificó la policía.
Esta, que utilizó gases lacrimógenos para dispersar la protesta, informó de haber efectuado al menos 13 arrestos. "Esta violencia no será tolerada", dijo el gobernador de Missouri, Eric Greitens, en Twitter. Un grupo de manifestantes intentó bloquear la autopista Interestatal 40 la policía lo impidió. Otro grupo bloqueó una intersección sentándose en la calle durante seis minutos de silencio.
Absuelto a pesar de las sospechas
Cinco semanas después de la conclusión de un juicio sin jurado, el juez encontró al expolicía de la ciudad Jason Stockley, de 36 años, no culpable de asesinato en primer grado en la muerte de Anthony Lamar Smith, de 24 años. Smith fue baleado cinco veces en su auto después de intentar huir de Stockley y su pareja el 20 de diciembre de 2011, luego de un presunto delito de drogas, dijeron las autoridades.
Durante la persecución, se escuchó a Stockley decir en un vídeo interno de la policía que iba a matar a Smith, dijeron los fiscales. Alcanzaron el vehículo de este y Stockley abrió fuego con su arma, según adujeron sus abogados, pensando que estaba armado. En el coche fue encontrada una pistola, pero que resultó tener sólo el ADN del policía, por lo que la fiscalía esgrimió que él la colocó como una pista falsa.
En su fallo, el juez Timothy Wilson dijo que dudaba de que la pistola fuera colocada por el agente: "el tribunal observa, basándose en sus casi treinta años en el banquillo, que un traficante local de heroína que no posea un arma de fuego representaría una anomalía".
LGC (Reuters/AP)