China ofrece diálogo al Dalai Lama
25 de abril de 2008
El gobierno tibetano en el exilio confirmó la oferta de diálogo realizada por la cúpula de Pekín. “Se nos comunicó verbalmente a través de canales privados que se hizo una propuesta de diálogo”, dijo el comisionado del líder de los tibetanos ante la Unión Europea, Kelsang Gyaltsen, en conversación con la Deutsche Welle. “Todavía no sabemos ni la fecha, ni el lugar o los temas a tratar durante ese encuentro”, dijo. China ha estado en el blanco de la crítica internacional tras la violenta represión de las protestas en Tíbet de cara a los Juegos Olímpicos. Gobiernos occidentales y el mismo Comité Olímpico Internacional exhortaron durante los últimos meses al gobierno de Pekín a propiciar un diálogo que alivie las tensiones entre China y el Dalai Lama.
¿Ha estado abierta una puerta?
La agencia estatal china Xinhua confirmó que la cúpula de Pekín buscará el contacto y el diálogo con un representante del líder de los tibetanos. La agencia citó a un funcionario chino diciendo que la política china hacia el Tibet no ha cambiado. “La política del gobierno central hacia el Dalai Lama se mantiene inalterable, la puerta al diálogo ha estado abierta”, dijo. Xinhua señaló que Pekín espera que el líder espiritual de los tibetanos adopte medidas para suspender las actividades que tienen como objetivo la división de China. Como pre-condición para iniciar las conversaciones, la agencia citó entre otros puntos que el Dalai Lama debe detener todos los intentos por sabotear y perturbar los Juegos Olímpicos.
Seis encuentros durante los últimos años entre representantes del Dalai Lama y de la cúpula china han tenido infructuosos resultados. Pekin exige al líder espiritual de los tibetanos que renuncie a las aspiraciones independentistas del Tíbet. Por su parte, el Dalai Lama ha reiterado una y otra vez que busca una autonomía verdadera para el pueblo tibetano y también que saluda a los Juegos Olímpicos en Pekín.
Diálogo entre UE y China
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso reclamó en Pekín un acceso libre a Tibet, tanto para los periodistas que cubran los Juegos Olímpicos, como para los turistas extranjeros. “Todo aquel que esté interesado en una mejor comprensión de las realidades debería permitir el acceso libre a la prensa”, dijo Barroso ante periodistas.
Tras conversaciones con el jefe de gobierno chino, Wen Jiabao, en Pekín, Barroso se mostró confiado en que habrá un giro positivo. “He hablado sobre este tema con Wen de manera abierta y sin reparos”, dijo Barroso. Europa intenta el difícil equilibrio entre promover el diálogo de China con el Dalai Lama para alcanzar una solución constructiva al conflicto y al mismo tiempo respeta íntegramente la soberanía China.
El gobierno alemán elogió la decisión china de iniciar el diálogo con el Dalai Lama. “Esperamos que este paso contribuya a solucionar el conflicto”, dijo el portavoz del ministerio del exterior, Martin Jäger. El gobierno alemán fue informado por Pekín de su intención de buscar el diálogo, según Jäger. El ministro alemán del Exterior, Frank-Walter Steinmeier mantuvo tres conversaciones telefónicas con su homólogo chino, Yang Jiechi, en las que le exhortó enfáticamente a entablar un diálogo con el Dalai Lama.
Situación política en Tibet
El líder espiritual de los tibetanos vive desde 1959 en el exilio. Después de la anexión de Tibet por parte de China, el Dalai Lama estableció un gobierno en el exilio en la localidad de Dharamsala, al norte de la India, que ha democratizado siguiendo el ejemplo occidental. Representa los intereses de unos 130.000 tibetanos, una minoría que desde la anexión de su país se ha dispersado en distintos países, como la India, Nepal, Estados Unidos, Canadá y Europa. Incluso los tibetanos que siguen en Tíbet reconocen al gobierno provisional en el exilio como el único legitimo.
En el 2001 fueron convocadas unas elecciones para designar a un jefe de gobierno que permitiría al Dalai Lama delegar la responsabilidad política manteniéndose como líder espiritual de los tibetanos. Desde entonces el Lama Samdhong Rinpoche es presidente del gobierno provisional. El Dalai Lama mantiene su papel de representante máximo de un Estado sin poder ni reconocimiento internacional. El gobierno tibetano en el exilio está conformado por ocho ministros electos por el Parlamento al que pertenecen un total de 46 diputados, que representan regiones, corrientes religiosas dentro del budismo, así como a los exiliados tibetanos en Europa y Norteamérica.