¿Caso aislado, xenofobia u odio al Islam? Asesinato de egipcia, un caso para la Cancillería
11 de julio de 2009
El debate está servido. El asesinato de una joven egipcia en el transcurso de una vista judicial en un tribunal de la ciudad alemana de Dresde ha desencadenado una intensa controversia. La víctima, de 31 años, recibió dieciocho puñaladas que le causaron la muerte inmediata. El agresor, un ciudadano ruso-alemán de 28 años, comparecía ante el tribunal en calidad de acusado.
La joven asesinada, Marwa El-Sherbini, lo había denunciado por injuria. Condenado a pagar 780 euros de multa, Axel W. apeló la sentencia. El pasado 1° de julio, la Audiencia Provincial de Dresde acogía la vista de apelación.
Agresión inesperada
Los hechos se remontan a agosto del año pasado. Víctima y agresor coincidieron en un parque infantil en Dresde. La joven egipcia iba acompañada de su hijo de tres años. Axel W., por su sobrina. Marwa El-Sherbini le pidió que dejara libre el columpio donde se hallaba sentado para que su hijo pudiera jugar con él. Una petición a la cual el ciudadano ruso-alemán respondió con insultos como "zorra", "islamista" o "terrorista". Unos insultos que El-Sherbini denunció. Tras ser condenado a abonar 780 euros por un delito de injurias, Axel W. apeló la sentencia.
Nadie, sin embargo, esperaba el fatal desenlace. Después de que la joven egipcia hubiera declarado como testigo, el acusado se abalanzó sobre ella armado con un cuchillo y la apuñaló reiteradamente. El marido de la fallecida intentó detenerlo. Confundiéndolo con el agresor, un policía le disparó en el muslo. Axel W. fue inmediatamente detenido e interrogado por la policía.
¿Hecho aislado u hostilidad contra el Islam?
En un primer momento, los medios de comunicación alemanes informaron del suceso como si de una simple agresión se tratara. "Acusado mata a testigo", titulaban. Posteriormente, y a medida que fueron trascendiendo más detalles del ataque, el enfoque comenzó a cambiar. El diario "Bild" tituló: "Xenófobo destruyó la felicidad de una familia". Una referencia, la de la xenofobia, que finalmente acabó por tornarse definitivamente en el "odio al Islam" como motivo del asesinato.
El 5 de julio, el Consejo Central de los Musulmanes en Alemania publicaba en su página virtual: "Asesinada por odio al Islam". Una declaración conjunta del Consejo Coordinador de los Musulmanes, en el que se hallan representadas las cuatro mayores asociaciones de musulmanes del país, se expresaba en los siguientes términos: "Marwa es también víctima del acoso y la difamación ejercidas, como mínimo, desde el momento en que se decidió prohibir el uso del pañuelo islámico en los servicios públicos (...) La política debe tomar finalmente en serio la Islamofobia en nuestro país".
El debate está servido
Las opiniones respecto al tema son encontradas. Hay quien opina que se trata de un caso aislado. Otros consideran que pone de manifiesto un comportamiento generalizado en contra del Islam que se hallaría profundamente enraizado en Alemania. Según la vicedirectora de Relaciones Externas del Centro del Moderno Oriente, con sede en Berlín, cuando menos habría que hablar de "prejuicios" generalizados respecto a la situación de la mujer en el Islam y el uso del pañuelo islámico.
En declaraciones a DEUTSCHE WELLE, Sonja Hegasy asegura que son muchos los que piensan que llevar el pañuelo "es una postura política, que las mujeres que llevan pañuelo se encuentra siempre presionadas por sus maridos". Sin embargo, Hegasy cree que "no hay que caer en el alarmismo" y que "no se puede utilizar un hecho singular como el acaecido para explotarlo e intentar reclutar más miembros para el movimiento islamista".
Repercusión al más alto nivel
Sea como sea, el suceso de Dresde no ha pasado desapercibido en las más altas esferas del poder. La propia canciller alemana, Angela Merkel, se ha ocupado de la cuestión. Fue en el marco de la cumbre del G-8 en L'Aquila. Merkel se entrevistó con el presidente egipcio, Hosni Mubarak, a quien le trasladó sus condolencias. También el ministro de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, dirigió una carta a su homólogo egipcio, Ahmed Abul-Gheit.
El caso ha corrido como la pólvora en el mundo musulmán. En algunos foros de Internet de carácter islamista se ha llegado a amenazar a Alemania con represalias. Incluso en Irán ha habido manifestaciones. Durante una marcha en Teherán se profirieron gritos como "Abajo con Alemania". El Gobierno iraní elevó también su protesta al ejecutivo alemán por lo que calificó de "acto inhumano".
Autor: EV / ZPR
Editor: José Ospina-Valencia