BMW se va, Schumacher regresa: un día agitado en la Fórmula 1

El multicampeón del mundo de la Fórmula Uno Michael Schumacher volverá a correr para Ferrari, en reemplazo del piloto brasileño Felipe Massa, si pasa un control físico, informó el miércoles un portavoz de la escudería italiana.

Massa sufrió el sábado un grave accidente en las pruebas de clasificación del Gran Premio de Hungría.

"Ferrari busca encomendarle a Michael Schumacher el auto de Felipe Massa mientras el piloto brasileño no esté en condiciones de correr", se lee en un comunicado del equipo.

"Michael Schumacher ha mostrado su buena predisposición y en los próximos días se someterá a un programa específico de preparación, al final del cual será posible confirmar su participación en el campeonato desde el Gran Premio de Europa del 23 de agosto", agregó.

El propio piloto alemán explicó su regreso a la Fórmula 1 con el siguiente comunicado publicado hoy en su página web:

"Lo más importante, de entrada: Gracias Dios las noticias sobre Felipe son bastante positivas. ¡Desde aquí le deseo todo lo mejor! Hoy a la tarde (local) hablé con Stefano Domenicali y Luca di Montezemolo y entre todos decidimos que me vaya preparando para reemplazar a Felipe. A pesar de que ya había archivado el tema Fórmula 1 hace tiempo y en manera definitiva, por mi relación con el equipo no puedo ignorar esta situación desdichada. Como competidor que soy, me entusiasma este nuevo desafío".

Michael Schumacher es considerado el piloto más exitoso en la historia del automovilismo deportivo, al quebrar en su trayectoria de 16 años prácticamente todos los récords.

Adiós, BMW

Todo sucedió muy deprisa. El martes por la noche, la directiva de BMW se reunía con Mario Theissen, el jefe de la rama de motores deportivos de la automotriz bávara, y el miércoles por la mañana ya había decisión. La temporada 2010 circulará sin los germanos. El motivo: el grupo busca nuevos rumbos y éstos parecen orientarse hacia temas más medioambientales.

"El desarrollo negativo de la situación económica durante los últimos doce meses no ha influido en la toma de esta decisión. Tampoco los resultados del equipo en 2009 han jugado papel alguno", aseguró el director de BMW, Norbert Reithofer.

Si se creen las declaraciones de Reithofer, las causas de la sorprendente retirada no tienen por lo tanto nada que ver con el mal puesto obtenido en el ranking de constructores: BMW ocupa en él el tercer lugar, empezando por el final; ni ha ejercido influencia el hecho de que la marca se haya subido una sola vez al podio en la presente competición.

Sin embargo, los informes internos sí hacen al parecer hincapié en la escasez de éxitos deportivos. La Federación Internacional de Automovilismo lamenta la retirada de BMW, pero, a diferencia del resto de los implicados, no se dice sorprendida: "Hace ya tiempo que estaba claro que el automovilismo no podría ignorar la crisis económica mundial", indica el organismo en un comunicado oficial, "reducir costos era necesario para disminuir la presión sobre las automotrices."

En Múnich llegaron pronto a la conclusión de que convenía alejarse de las pistas. "Teniendo en cuenta los intereses de la empresa, esta decisión es la correcta", aseguró Theissen. BMW no desaparece por completo de la Fórmula 1, pero las carreras dejarán de ser su prioridad y la empresa bávara se concentrará en otros resortes.

El incierto futuro del equipo BMW

BMW quiere prestar más atención al desarrollo de tecnologías que protejan el medio ambiente. Hoy en día, los más rápidos no son siempre los primeros. A veces, quienes menos contaminan llegan antes a la meta. Y, en cualquier caso, tampoco en la velocidad recaudaba el consorcio alemán altos méritos. "BMW había renunciado al objetivo de ganar el título de campeón mundial de la Fórmula 1. No se han logrado éxitos y, desde esa perspectiva, entiendo la decisión", dijo el piloto de la escuadra germana Nick Heidfeld.

Aún así, Heidfeld no ocultó su sorpresa: "no contaba con algo como esto y lo lamento mucho, especialmente por el equipo y por todos los trabajadores que han sacado este proyecto adelante durante años". "Puesto que la decisión la tomamos anoche, no hemos podido de informar con tiempo a los pilotos", reconoció Theissen, "están decepcionados, igual que el resto de los miembros del equipo, pero los corredores están acostumbrados a las decisiones rápidas", añadió.

El futuro de Heidfeld y Kubica, los dos pilotos de BMW, es tan incierto como el del mismo Mario Theissen. También para los 300 empleados que ocupaba la rama deportiva de BMW se trata de encontrar lo antes posible "una solución". Indicaciones más concretas al respecto no pudieron obtenerse en Múnich.

Autor: Philipp Eger/ agencias

Editor: Pablo Kummetz