Bayern München: cero y van dos
16 de mayo de 2010En Madrid, contra el Inter Milán el próximo sábado, las cosas no lucirán tan fáciles como en la capital alemana este fin de semana, donde el Bayern no sólo derrotó al Bremen por marcador de 4-0, sino que se encargó de entregar una imponente exhibición de dominio del rival, de absoluto control de las acciones, y de un perfecto funcionamiento colectivo reforzado por la genialidad individual de sus principales estrellas: Robben, Ribéry, Olic y Schweinsteiger, autores de los goles.
Una gran racha
El club de Múnich celebró por segunda vez en Berlín, donde hace una semana confirmó el campeonato en la Bundesliga y esta la Copa Alemana, lo cual llena de confianza al equipo de poder dar la sorpresa en Madrid y tener al final de la temporada “tres de tres”, el tan codiciado “triple”, todos los títulos que disputa. Una victoria en la final de la Champions League y el Bayern conseguirá algo que hasta ahora ningún club en Alemania ha logrado, un triunfo obtenido sólo por cinco equipos en Europa: Celtic Glasgow (1967), Ajax Ámsterdam (1972), PSV Eindhoven (1988), Manchester United (1999) y FC Barcelona (2009).
“El Bayern ganó merecidamente, nosotros no pudimos contenerlo y no tuvimos oportunidades” reconoció el entrenador del Bremen, Thomas Schaaf, al terminar el partido en el Estadio Olímpico; su capitán, Thorsten Frings, fue aún más lejos y sostuvo que “es muy difícil frenar a un conjunto que trae tan buena racha”.
El presidente del club muniqués, Uli Hoeness, estuvo de acuerdo con la apreciación de Frings, pero para él esto no es cuestión de azar, sino “la consecuencia lógica del desarrollo del equipo durante el 2010” y explicó que el secreto del éxito radica en que el Bayern “ejerce una posesión del balón del 70 por ciento, eso obliga al rival a correr más y le permite al equipo lucir más fresco”.
Por el triple
Hoeness se mostró cauteloso al formular los objetivos del Bayern para el cierre de la temporada y dijo que ya es muy positivo el que se haya ganado la Bundesliga y la Copa Alemana, pero que “no hay que exagerar con las expectativas, un título detrás del otro”. Los jugadores, en cambio, no guardan ninguna reserva sobre sus deseos: “Queremos ganar a toda costa el triple” fueron las palabras del defensor Philipp Lahm como vocero de sus compañeros.
El entrenador Louis van Gaal comparte ese sentimiento: “No me sorprende que hayamos ganado la Copa Alemana, no me esperaba otra cosa que un triunfo. Contra el amigo José Mourinho podemos dar más sorpresas porque podemos ser mejores. Eso lo podemos demostrar ante el Milán”, anunció lleno de confianza.
Con el trofeo de la Copa Alemana en su poder, el Bayern enfoca su energía en el último partido del año futbolístico que jugará en Madrid el sábado entrante: la final de la Champions League contra el Inter Milán. El equipo muniqués vive una embriaguez de títulos que para algunos puede ser arriesgada, entre ellos su ex capitán el legendario arquero Oliver Kahn, quien advirtió: “Cuidado con exagerar, no hay que ir demasiado lejos con la confianza en sí mismo porque ese es el peligro más grande que existe cuando todo marcha bien”. Y para el Bayern todo marcha bien.
Autor: Daniel Martínez
Editor: Enrique López