Arrecian las críticas contra la Copa del Mundo de esquí
20 de octubre de 2022En Sölden, una blanca pista de esquí se extiende hacia el valle, preparada "con nieve del año pasado", como señala una portavoz, quien agrega que "solo se ha utilizado una cantidad muy pequeña de nieve artificial". Sin embargo, a su alrededor apenas se ve nieve, sino un montón de escombros. De hecho, solo funcionan nueve de los más de 30 remontes de la zona de esquí.
No obstante, el inicio del gran circo de las carreras alpinas tendrá lugar aquí. Para muchos, demasiado pronto. Entre ellos se encuentra el entrenador alemán, Wolfgang Maier. "Basta con que compitamos allí en noviembre", dice. Las carreras de eslalon de mediados de octubre son, según él, la parte más visible del problema. Para estar bien preparados, el entrenamiento en nieve de los corredores se adelanta a finales del verano.
Por ello, el exesquiador profesional Felix Neureuther exigió el año pasado que se tomaran medidas claras: "No se debe permitir seguir entrenando en los glaciares en verano, entre junio y septiembre" y correr allí "en una época en la que los glaciares se están derritiendo". El deporte debería preservar su credibilidad, afirmó Neureuther. La naturaleza pone cada vez más trabas a los profesionales del esquí. El glaciar de Saas-Fee (Suiza), donde numerosas naciones celebran sus campamentos de entrenamiento, tuvo que cerrarse en ocasiones por falta de nieve.
Sostenibilidad frente a la expansión económica
No es que la Federación Internacional de Esquí y Snowboard (FIS) sea completamente ajena a la realidad climática. El presidente de la FIS, Johan Eliasch, que fue elegido el año pasado en circunstancias controvertidas, incluso lanzó su propia iniciativa para la protección del clima. Según el plan, las emisiones de CO2 de la serie de eventos mundiales se compensarán comprando y protegiendo zonas de selva tropical. Al mismo tiempo, Eliasch está impulsando la expansión de la Copa del Mundo. Se está hablando de carreras en las pistas olímpicas de China, y una nueva y espectacular carrera para atraer la atención mundial ya este invierno.
El escenario es el Cervino, la montaña de las montañas en los Alpes. Está previsto que la próxima semana comiencen allí dos carreras de descenso masculinas. Desde la salida, a más de 4.000 metros de altitud, los corredores corren desde Suiza hasta la meta en Cervinia (Italia). Un nuevo espectáculo, que se une a las filas de pistas legendarias, como la de Wengen o el Streif de Kitzbühel. Hans Knauss, antiguo corredor austriaco y actual comentarista de televisión, resumió su opinión de manera contundente: "Una imbecilidad".
En cualquier caso, el espectáculo es poco convincente. Hay muy poca nieve en el glaciar, donde no se puede hacer nevar artificialmente. La nieve que hay se utiliza para cerrar las grietas. El tramo inferior de la ruta de Zermatt a Cervinia, en Italia, es prácticamente inexistente hasta el momento. El entrenador alemán, Wolfang Maiers, acude la cabeza con resignación. Su sugerencia: "Hay que cambiar las reglas generales". Es decir: "No empezar el Mundial hasta principios o mediados de noviembre y luego solo correr hasta mediados de marzo". Es decir, en los momentos en que todavía hay nieve razonablemente fiable. "Sencillamente, hay que que aceptarlo", subraya.
(gg/ms)