Alemania falla su meta
10 de agosto de 2012A dos días de terminar los Juegos Olímpicos, queda claro que Alemania, que este viernes apenas acumulaba un total de 38 medallas (10 de oro), formuló sus objetivos deportivos muy por encima de lo que la realidad le deparó en Londres. Esto genera controversia a nivel nacional.
Exceso de optimismo
En Alemania, al conocerse la meta olímpica de la delegación nacional, se habla de un ¨exagerado optimismo¨, especialmente cuando se recuerdan los resultados obtenidos en las máximas competencias internacionales en los años recientes.
El objetivo de ganar 86 medallas, señalan las críticas, no tiene ni siquiera un soporte histórico, ya que el mejor balance olímpico alemán, obtenido en Barcelona 1992, inmediatamente después de la reunificación de la República Federal de Alemania con la República Democrática Alemana, registra apenas 82 medallas (33 de oro).
Además, lo propuesto para los Juegos Olímpicos de Londres 2012 guarda pocas proporciones con el balance que arrojó Pekín 2008, donde se conquistaron 41 medallas (16 de oro), así como tampoco con los resultados conseguidos en las Olimpiadas de invierno Vancouver 2010, donde se falló el objetivo propuesto en 10 medallas (se querían 40).
Secreto público
La información revelada hoy sobre las metas olímpicas alemanas, que se formulan cada cuatro años inmediatamente terminan los Juegos, era mantenida en estricto secreto por el Comité Olímpico y el Ministerio Federal del Interior, responsable del deporte nacional.
Su publicación solo fue posible como resultado de un proceso jurídico que ganaron los periodistas de la casa editorial WAZ, quienes investigaban el monto detallado de la financiación estatal, cercana a los 130 millones de euros anuales, a las diferentes disciplinas deportivas, el uso que se hace de estos recursos, y las razones que le justifican.
Gran decepción
Al revisar las previsiones alemanas, solo dos deportes se acercaron a las metas: el canotaje, que obtuvo ocho de las nueve medallas propuestas, y el tenis de mesa, disciplina donde únicamente se contaba con una medalla y se alcanzaron dos. La natación, en cambio, fue la gran decepción alemana, pues dada la calidad de sus representantes se esperaban ocho medallas y al final apenas se contabilizó una.
Autor: Daniel Martínez
Editora: Claudia Herrera Pahl