Viento en popa a pesar de Irak
9 de abril de 2003
Las ventas del fabricante alemán de automóviles BMW bajaron en marzo un 1% respecto al mismo mes del 2002 debido al cambio de modelos como la serie 5 y el 'roadster' Z4, según cifras del fabricante.
Las entregas de la marca BMW bajaron en marzo incluso un 6,7% hasta las 88.450 unidades, pero el volumen total de ventas fue compensado por la buena aceptación del modelo Mini, del que salieron 45.810 vehículos de la planta británica de Oxford.
En el primer trimestre del año las ventas de la casa bávara subieron en total un 0,5% hasta las 261.570 unidades, pero las de la marca BMW descendieron un 7,3 %. Pese a este retroceso, el fabricante mantiene las previsiones de que superará las cifras récord de ventas de 2002 de más de un millón de vehículos ante todo por la introducción de la nueva serie 5 en la segunda mitad de año y del 'roadster' descapotable Z4 en Europa en las próximas semanas.
Daimler-Chrysler optimista
El grupo automovilístico DaimlerChrysler por su parte, manifestó su satisfacción por la evolución de las ventas en el primer trimestre de este año, pese a los descuentos que ha debido hacer para incentivar las ventas en EE.UU. El presidente del consorcio, Jürgen Schrempp, dijo en la junta anual de accionistas celebrada en Berlín que las cifras provisionales de los primeros tres meses son 'bien alentadoras', aunque será difícil alcanzar los objetivos que se ha impuesto la empresa para el conjunto del año.
DaimlerChrysler se ha propuesto en 2003 mejorar los resultados de explotación respecto a 2002, excluyendo los efectos extraordinarios. Schrempp señaló que los elevados incentivos dados en el mercado norteamericano para turismos y vehículos comerciales han perjudicado los beneficios de la compañía en el primer trimestre.
En este sentido, el ejecutivo se lamentó de lo extremadamente difícil y de la intensiva competitividad que suponen estos incentivos, tras precisar que las ventas en ese mercado han permanecido por debajo del mismo trimestre de 2002. Con todo, Schrempp indicó que el socio estadounidense Chrysler no ha podido sustraerse a esta tendencia, pero que la marca se esforzará por lograr unos beneficios operativos en 2003 de cerca de 2.000 millones de dólares antes de efectos extraordinarios. En 2002 Chrysler obtuvo un beneficio neto de explotación de 1.300 millones de euros.