"Vatileaks", continuará...
29 de septiembre de 2012
El proceso contra el ex mayordomo del Papa Paolo Gabriele, acusado de haber robado documentos confidenciales y de filtrarlos a la prensa, comenzó este sábado (29.09.2012) ante una corte vaticana, informó la Santa Sede.
El ciudadano vaticano de 46 años, padre de tres hijos y que formaba parte del círculo más cercano al Pontífice, está acusado de robo con agravantes. Algunos de los documentos, sustraídos de la residencia del Papa, fueron publicados por la prensa y luego en un libro del periodista italiano Gianluigi Nuzzi, titulado: "Su Santidad: Los papeles secretos de Benedicto XVI".
Desde principios de año fueron apareciendo en la prensa documentos secretos vaticanos de contenido muy sensible, que trataban de corrupción, negocios poco transparentes en el banco vaticano IOR y sobre un presunto complot para matar a Benedicto XVI. Los analistas creen que detrás del escándalo conocido como "Vatileaks" se esconde una lucha de poder en la cúpula de la Iglesia católica. Nuzzi declaró varias veces que Gabriele era sólo "una de sus fuentes".
Un hombre muy religioso, "de inteligencia limitada"
Pese a que según el derecho vaticano no es imprescindible que esté presente el acusado, Gabriele compareció en persona con su abogada ante el tribunal independiente, formado por tres profesores de derecho italianos. El ex empleado fue arrestado en mayo y estuvo dos meses en prisión preventiva hasta pasar a arresto domiciliario. Gabriele -que admitió el robo, se disculpó y pidió perdón al Papa- podría ser condenado a un máximo de cuatro años de cárcel.
Un examen psiquiátrico describe al acusado, un hombre muy religioso, como una persona de inteligencia limitada. En casa de Gabriele se encontraron documentos secretos que procedían en parte directamente del escritorio de Benedicto XVI. Además de las copias de cientos de documentos se encontraron en el domicilio un cheque de 100.00 euros destinado a Benedicto XVI, barras de oro y un valioso libro. Se trataba de regalos dirigidos al Papa que pensaba devolver, según aseguró Gabriele.
Dos procesos: contra el mayordomo y contra un informático
El tribunal, presidido por Giuseppe Dalla Torre, es la primera instancia de la justicia vaticana. Los magistrados separaron su caso de otro contra Claudio Sciarpelletti, un informático que trabajaba en el Vaticano. Sciarpelletti está acusado jdel cargo menos grave de complicidad para cometer el robo. En su poder se encontró un sobre con papeles reservados y el informático incurrió en contradicciones al intentar explicar su procedencia. Sciarpelletti se hizo representar por un abogado. En su caso la sentencia podría llegar a un año de prisión.
De ser hallados culpables, los acusados deberían cumplir las penas en cárceles italianas, pero el Papa también puede indultarlos. Además de representantes de los medios oficiales Osservatore Romano y Radio Vaticano, solamente tienen acceso a la sala ocho periodistas que trabajan en pool informando al resto de la prensa.
Aunque se desconoce cuánto durará el juicio exactamente, se considera que el Vaticano quiere acabar pronto para que el escándalo no opaque el sínodo de obispos que se celebra del 7 al 28 de octubre. El presidente del tribunal, Giuseppe Dalla Torre, dio a entender que el proceso podría podría concluir tras sólo cuatro jornadas, informó la prensa presente en la sala.
Fuente: dpa
Editora: Rosa Muñoz Lima