Un ángel de gira por Estados Unidos
13 de enero de 2006Kölner Stadt-Anzeiger, de Colonia: "Las relaciones entre Estados Unidos y Alemania siguen siendo difíciles por factores que ninguno de los dos países pueden influenciar. Entre ellos el creciente alejamiento entre ambas naciones desde la década de los 60. Desde entonces se registra en Alemania una secularización radical, por el contrario en Estados Unidos se vive el renacimiento de la religiosidad. Mientras que en Alemania hay un nuevo entendimiento del estado que se presenta en modelos supranacionales como la Unión Europea y la Organización de las Naciones Unidas, en Estados Unidos la cooperación internacional continúa siendo un complemento necesario de su política nacional, dependiendo el caso. Alemania es una nación de pacifistas moderados que ve en la guerra sólo un último medio, en Estados Unidos la guerra es un instrumento imprescindible de la política."
Merkel puede mejorar las relaciones entre la UE y EEUU
Trouw, de la Haya: "Merkel no es el polo opuesto de Schröder. Tampoco aliado incondicional de Estados Unidos. Puede sin embargo, mejorar las relaciones con los estadounidenses. También por parte estadounidense existe la necesidad de sanar las heridas que ha dejado la guerra de Irak.
Si Merkel es capaz de tender puentes dentro de la Unión Europea y logra superar un conflicto tan difícil como el de las finanzas europeas, existe la esperanza de que logre tender un puente trasatlántico entre Estados Unidos y aquellas naciones europeas que mantienen una postura crítica hacia el país americano. Esto beneficiaría la cooperación internacional en diversos frentes y no sólo en el ámbito de la lucha contra el terrorismo."
¿Cambiará de bando?
Le Figaro, de París: "La visita de Angela Merkel a Washington es mucho más que un viaje trasatlántico. Es un baño rejuvenecedor para Alemania en los ojos de Estados Unidos, que sólo espera poder llevar a este miembro de "la vieja Europa" al bando de la "nueva Europa". (...) La crisis de Irán les otorga, en opinión de ambos países, la ocasión propicia para coordinar sus políticas. El nuevo discurso de Berlín frente al presidente ruso Vladimir Putin, un "gran amigo de Schröder", pero sólo un "socio estratégico" de Merkel, asemeja el discurso de Estados Unidos. El resto es química personal. A George W. Bush, que se ha rodeado de mujeres en su gabinete, seguramente le gustará el pragmatismo de la canciller. Y con seguridad aplaudirá las diferencias entre Merkel y su antecesor."