Terrorismo: Alemania refuerza medidas de seguridad
22 de noviembre de 2010La policía berlinesa cerró al público el paso a la cúpula y a la terraza del edificio, uno de los atractivos turísticos de la capital alemana. La cúpula de cristal, diseñada por el arquitecto Norman Foster, es recorrida diariamente por cientos de personas. Unicamente bajo previo aviso los visitantes podrán acceder a un restaurante situado en la parte superior del emblemático edificio que desde 1999 es sede del Parlamento alemán.
El responsable de Interior de la ciudad-Estado de Berlín, Erhart Körting, advirtió que las medidas de seguridad alrededor del Reichstag serán fortalecidas considerablemente. Körting señaló que serán cerradas otras áreas al público y que unos 60 policías formarán un cordón alrededor de la zona. El semanario alemán Der Spiegel advirtió en su versión online el sábado que grupos islamistas planeaban un atentado contra el Reichstag.
En Colonia se vigilan centros islamistas
También en el Estado federado de Renania del Norte-Westfalia, el de mayor población del país, se han fortalecido las medidas de seguridad. Efectivos policiales fueron desplegados en lugares públicos y concurridos como aeropuertos, estaciones de metro y de tren.
Adicionalmente se vigila más estrechamente determinados centros islámicos en toda la región del Ruhr, así como el área de Bonn y Colonia, Aquisgrán y Wuppertal, según informó una portavoz policial. Las autoridades de protección a la Constitución de dicho Estado han iniciado un estudio sobre el patrón de radicalización que siguen los alemanes convertidos al Islam.
Un estudio realizado a principios de año por la Oficina Federal de Investigación Criminal (BKA) indica que en los distintos Estados federados hay alemanes conversos que se reunen en determinadas mezquitas y algunos de ellos representan una amenaza para la seguridad.
Analistas creen que los conversos son más vulnerables a lavados de cerebro con versiones distorsionadas de la fe y al querer demostrar su compromiso con su nueva fe son más propensos a convertirse en extremistas. Para las redes islamistas radicales, el terrorista ideal es un hombre rubio de ojos azules con pasaporte europeo que no corresponda a prototipo que esperan las fuerzas de seguridad.
Provocar el mayor daño posible
El experto en terrorismo, Rolf Tophoven señaló en una entrevista reciente que Al Qaeda busca siempre provocar el mayor daño posible a la población civil así como generar un gran efecto mediático. El experto advierte que los lugares más vulnerables son los aeropuertos, las estaciones de metro y de tren pero también los mercados navideños, así como los símbolos financieros y económicos.
El ministro del Interior, Thomas de Maiziére alertó el miércoles pasado sobre un agravamiento de la amenaza terrorista. Supuestamente un convertido arrepentido, al parecer de origen alemán, fue quien advirtió a la policía sobre un plan para atacar el Reichstag durante las próximas semanas.
En el edificio del Senado de Berlín también aumentaron los controles de seguridad que obliga a identificarse a todos los visitantes. En los lugares públicos se exhorta a la población a través de letreros a mantenerse alerta y reportar cualquier objeto sospechoso o equipaje sin dueño. En los lugares concurridos, como la plaza Alexanderplatz, se ve claramente una mayor fuerza policial en la calle.
Mejor equipamiento policial
El socialdemócrata Thomas Oppermann pidió una mejor equipamiento para la policía federal. “La presencia policial de cara a la amenaza del terrorismo islámico requiere mayores recursos”, dijo el político que criticó los planes de ahorro en las fuerzas de seguridad calificándolos de irresponsables. “Necesitamos una fuerza policial que esté en condiciones de protegernos”, advirtió.
El insuficiente equipamiento y entrenamiento policial fueron también tematizados por el sindicato de la policía. “En comparación con situaciones extremas como atentados en escuelas, las fuerzas de seguridad están poco entrenadas ante la eventualidad de un ataque terrorista”, dijo el presidente del sindicato de la policía, (GdP) Bernhard Witthaut.
Autora: Eva Usi/ Dpa/Afp
Editor: Pablo Kummetz