Tercera condena contra Berlusconi: ¿Qué pasará ahora?
25 de junio de 2013La condena a Silvio Berlusconi a siete años de cárcel y el veto de asumir cargos públicos, de por vida, ha creado revuelo en Italia. Maurizio Gasparri y Fabrizio Cichitto, del partido de Berlusconi, han calificado el fallo como una "vergüenza para la democracia”.
El izquierdista Nichi Vendola, líder en la región de Apulia, ha instado, por el contrario, a Berlusconi a “abandonar el escenario político”. Una postura respaldada por grupos de ciudadanos que frente al Palacio de Justicia de Milán alababan a gritos la labor de la fiscal Ilda Boccassini.
La corte confirmó las acusaciones de que Berlusconi abusó de su poder para lograr que Karima El-Mahroug, conocida como”Ruby”, fuera liberada por la policía, a pesar de que había sido apresada por robo. Además, según el fallo Berlusconi le pagó por servicios sexuales a esta mujer, en su momento menor de edad.
La apelación de los abogados de Berlusconi
Como la sentencia tuvo lugar en primera instancia, Berlusconi no irá a la cárcel, ni tendrá que abandonar su silla en el Senado italiano. Los abogados anunciaron su apelación, así que Berlusconi no pierde nada más que su ya incipiente reputación.
Pero a los canales de televisión de propiedad de Berlusconi les queda cada vez más difícil presentar a su jefe como un inocente, aunque él continúe declarándose como una “víctima de la Justicia”.
La defensa de Berlusconi acusa a la fiscal de Milán, Ilda Bocccassini, de perseguir a Berlusconi por razones políticas. Pero todos los intentos de desacreditar a la corte y hacer trasladar el proceso a otra ciudad fueron rechazados por un consejo de jueces independientes.
Ningún intento de detener el juicio en el caso de Ruby tuvo éxito. La ciudadana marroquí, coprotagonista del escándalo, es hoy mayor de edad, está casada y tiene una hija. Ruby se abstiene de dar declaraciones y solo se sabe que está de vacaciones en México.
Van tres condenas y vienen más
Pero las condenas por procesos en el caso de Ruby no son las únicas. El político italiano también fue condenado en el caso Unipol del que salió culpable de haber propiciado la publicación de interceptaciones de llamadas telefónicas de contradictores políticos. También en otro proceso sobre la compra y venta a sobreprecios de derechos de transmisión de televisión a Berlusconi le fue probada su culpa.
Pero hay otro proceso, que es el que más teme Berlusconi: uno sobre evasión de impuestos. Actualmente se debate, tras su apelación en segunda instancia, si el correspondiente juicio tuvo o no errores de procedimiento. Si no, la condena queda vigente: cuatro años de cárcel y otro veto a asumir cargos públicos durante cinco años.
Una prohibición de investir cargos públicos golpeará más a su partido que una condena a prisión, a la que nunca irá, debido a su edad.
Autor: Kirstin Hausen / José Ospina-Valencia
Editor: Enrique López