Seúl celebra pedido de ONU para juzgar crímenes en Corea del Norte
19 de noviembre de 2014Corea del Sur celebró la aprobación en la Asamblea General de la ONU de una resolución que pide llevar a la Corte Penal Internacional (CPI) los "crímenes contra la humanidad" cometidos por las autoridades de Corea del Norte.
"Apoyamos plenamente la resolución", indicó este miércoles (19.11.2014) un representante del Ministerio de Unificación en una sesión informativa. Corea del Sur "cooperará activamente con la comunidad internacional para mejorar la situación de los derechos humanos en Corea del Norte", apuntó el funcionario, en línea con la postura expresada también por la Cancillería surcoreana.
"Se trata de un avance muy positivo", valoró, por su parte, Sokeel Park, director de análisis y estrategia en Seúl de Liberty in North Korea (LINK), una de las ONG más activas a la hora de promover el cambio político en Corea del Norte y ayudar a los refugiados que escapan del país.
Park indicó a Efe que para LINK, la mayor importancia de la resolución estriba en que "por primera vez la Asamblea General de la ONU presenta un lenguaje contundente y acciones importantes para condenar las violaciones de los derechos humanos de 24 millones de norcoreanos".
Con 111 votos a favor, 55 abstenciones y 19 votos en contra, la comisión de derechos humanos de la Asamblea General de la ONU aprobó el martes una resolución no vinculante que insta a "tomar las medidas apropiadas para asegurar que "rindan cuentas" los responsables de los abusos contra la población norcoreana.
Resolución debe ser refrendada por Consejo de Seguridad
Esta resolución, que deberá ser refrendada por el pleno de la Asamblea en diciembre, tiene como fin último llevar el caso ante la CPI, algo que solo podría hacerse en última instancia a través del Consejo de Seguridad, ya que Pyongyang no ha firmado el Estatuto de Roma para aceptar la jurisdicción del tribunal.
Sin embargo, aunque el caso llegue al Consejo se teme que China y Rusia, que votaron ayer en contra de la resolución, utilicen su derecho de veto para evitar que se juzguen en La Haya los "crímenes contra la humanidad" del régimen de los Kim, documentados en un informe de la ONU que vio la luz en marzo.
La investigación reveló evidencias de exterminio, asesinato, esclavitud, desaparición forzosa, ejecuciones sumarias, torturas, violencia sexual, abortos forzosos y privación de alimentos, entre otros abusos, y estimó que unas 120.000 personas permanecen recluidas en campos de trabajos forzados. Corea del Norte, que mantiene que el informe es "inventado", protestó fuertemente tras la aprobación de la resolución.
Choe Myong-nam, uno de los diplomáticos norcoreanos en Naciones Unidas, rechazó ayer en Nueva York la resolución y la atribuyó a "una escandalosa e irracional campaña de EEUU y sus acólitos", según citó la agencia surcoreana Yonhap.
Por su parte, cuatro países latinoamericanos -Bolivia, Cuba, Ecuador y Venezuela- votaron en contra de la resolución, y Cuba incluso presentó una enmienda para evitar que Corea del Norte sea juzgada por la CPI, aunque ésta fue rechazada en una segunda votación.
CP (efe, dpa)