Seyne les Alpes espera a los familiares

No oyeron caer el avión. A pesar de los escasos kilómetros que separa Seyne les Alpes del lugar del accidente, ninguno de los mil doscientos habitantes del pequeño pueblo montañés ha oído nada. El camino que lleva hacia el lugar es accesible sólo a pie. Y el terreno es muy abrupto. Ni siquiera los todoterreno pueden subir, cuenta Amar Djeffal, que lleva allí arriba su rebaño a pastar. "Se necesita una hora y media subir a pie". Se debe pasar un primer valle y luego, en el segundo, está el Col de l'Estrop. Los valles están deshabitadas, "entre Seyne e Italia" no hay nada, dice Amar. Las empinadas laderas son rocosas y estériles.

Lugar del accidente está 600 metros más arriba

En el pueblo se dieron cuenta de lo sucedido cuando llegaron la policía, los bomberos y las unidades militares. Llegaron a cientos. A medianoche se apostaron dos enormes grúas móviles de protección civil en la calle principal de Seyne les Alpes. Aunque no está claro para qué. El lugar del accidente se encuentra a seiscientos metros por encima del pueblo. Y los restos del fuselaje sólo se podrán extraer en helicóptero.

Nueve aparatos comenzaron a trabajar en las labores de rescate durante el transcurso del martes . Ahora están estacionados en las afueras, donde comienza el sendero hacia el lugar del accidente. Así que todas las vías de acceso están bloqueadas.

Los lugareños ayudan en lo que pueden

Los restos del Airbus accidentado se encuentran en el estrecho valle. La fuerza del impacto lo ha roto en pedazos diminutos, esparcidos en dos hectáreas. A las pocas horas aparece la primera caja negra. Sin embargo, recuperar los cuerpos llevará varios días, según afirmó el portavoz de las labores de rescate. El trabajo es extremadamente difícil. Desde Marsella han llegado expertos y representantes de la Fiscalía, que ha abierto una investigación por posible homicidio imprudente.

No sólo han llegado al lugar los servicios de rescate. En cuestión de horas llegan una docena de unidades móviles, para la emisión por satélite, de canales de televisión de todo el mundo. A la una de la noche todavía llegan reporteros a calentarse en el único local del pueblo. Céline Ripert mantiene el "Aux Bons Amis" ('a los buenos amigos') normalmente cerrado en marzo. Cuando se enteró del desastre, preparó provisiones para acoger a los visitantes inesperados. "Por lo general esto es muy tranquilo, viene gente a disfrutar de la naturaleza".

Los preparativos para familiares y políticos

El alcalde de Seyne des Alpes ha reservado todas las habitaciones en muchos kilómetros a la redonda para acoger a los familiares de las víctimas que quieran acercarse al lugar del accidente. Se espera que lleguen hoy miércoles. Se organizará también un funeral en su memoria. El alcalde de la cercana ciudad de Digne espera que allí también lleguen cientos de personas, entre familiares, personal de rescate y fuerzas de seguridad. A primera hora de la tarde se espera que llegen la canciller alemana, Angela Merkel, el regidor del Estado federado de Renania del Norte-Westfalia (del que Düsseldorf es la capital) Hannelore Kraft y el presidente español, Mariano Rajoy. Desde París, el presidente Francois Hollande acudirá a recibirlos. Las autoridades visitarán la instalación, en el polideportivo local, de la morgue temporal para las víctimas.

Los equipos de rescate detuvieron ayer la búsqueda al caer la noche. Al amanecer, un grupo de gendarmes aseguraba el lugar del accidente para facilitar el trabajo de los expertos durante el día. Habían pasado la noche en tiendas de campaña y no hay tiempo que perder.