¿Seguridad sobre libertad?
9 de julio de 2007La mente del ministro alemán del Interior, el cristianodemócrata Wolfgang Schäuble, es al parecer prolífica cuando se trata de producir ideas acerca de cómo combatir eficientemente el terrorismo. Sus últimas propuestas del fin de semana han sorprendido a buena parte de la escena política, también a miembros de sus propias filas.
En caso de no poder expulsar del país al sujeto tildado de peligroso, Schäuble propone sacarlo directamente -basándose en la sospecha-, no permitirle tener un teléfono móvil ni acceso a internet. También, para los casos de que se lo catalogue de extremadamente peligroso, debería haber un reglamento que haga posible eliminarlos. Así de claras las ideas del ministro Schäuble.
De dudoso calibre
El ministro bávaro del Interior, Günther Beckstein, correligionario de Schäuble y político bastante conocido por sus medidas drásticas y por su poca condescendencia, se ha distanciado de estas ideas. Aquello de crear las bases legales que permitan el asesinato selectivo de terroristas no lo convence, y por más necesario que sea el combatir el terrorismo islamista "los pilares de la Constitución" no deben alterados por las buenas, declaró Beckstein. Que se encuentra "sorprendido", declaró este severo político bávaro.
El ministro en cuya cabeza bullen tantas ideas fue en su momento una brillante estrella en el firmamento del futuro de la CDU. Un atentado en 1990 lo condenó a una silla de ruedas y la rápida ascensión de Angela Merkel, a un segundo plano. De querer borrar los límites entre los códigos que rigen en tiempos de guerra y paz se lo acusa. El impresionante y controvertido despliegue de seguridad que organizó con motivo de la Cumbre del G-8 en Heiligendamm lo colocó bajo una algo tenebrosa luz. El lema de "seguridad sobre todas las cosas" se lleva por delante derechos fundamentales del ciudadano.
Simplemente inconstitucional
Lo cierto es que, por lo menos hasta el momento, la crítica le llueve de todas partes; de parte del Sindicato de la Policía, del socio de coalición SPD, de liberales y verdes. Kurt Beck, presidente de los socialdemócratas, declaró: "Tenemos que hacer todo para garantizar que protegemos al ciudadano del terrorismo y la criminalidad, pero no podemos llegar a proteger tanto que matemos la libertad".
Por su parte, el jefe de los verdes, Reinhard Bütiköfer, declaró: "En la cabeza del ministro del Interior existe al parecer un único valor: su promesa de garantizar la seguridad. Pero no puede comprobar que con sus ideas garantice la seguridad. Lo que seguramente sí garantizan es el fin de la libertad, tal como la conocemos".