Se prorrogan las negociaciones nucleares con Irán
19 de julio de 2014El plazo para las negociaciones nucleares que lleva adelante el grupo 5+1 con Irán no expirará, tal como estaba previsto, mañana, 20 de julio, sino que será prorrogado hasta el 24 de noviembre, informaron esta madrugada círculos diplomáticos en Viena. La siguiente ronda de negociación, aún sin fecha fija, se espera para la segunda mitad de agosto.
Esta semana diversos representantes internacionales dejaron entrever la posibilidad de una prolongación de las negociaciones a través de las cuales Irán busca, entre otras cosas, llegar a un acuerdo que levante las sanciones que le han sido impuestas debido a su política nuclear. La decisión se ha tomado porque hasta el 20 de julio no se podrán superar las diferencias que aún persisten entre las partes.
Una prórroga prevista
Las negociaciones en Viena apuntan a lograr que Irán acepte limitar su programa atómico. La comunidad internacional quiere estar segura de que Teherán no está desarrollando una bomba nuclear. El grupo 5+1 (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania) acordó en noviembre de 2013 con Irán que se negociaría durante seis meses, pero desde un principio se contempló la posibilidad de prolongar el plazo.
En la actualidad, la República Islámica cuenta con unas 19.000 centrifugadoras, de las que la mitad, aproximadamente, están paradas en virtud del preacuerdo firmado en Ginebra en noviembre. Sin embargo, el líder supremo, ayatolá Alí Jameneí, ha afirmado que "en los próximos años" la capacidad de enriquecimiento de uranio deberá multiplicarse casi por diez para cubrir las necesidades de la central nuclear eléctrica de Busher.
Puntos de desacuerdo
Irán tiene un contrato con Rusia para que le suministre ese combustible hasta el 2021, pero insiste en generarlo de forma independiente después de esa fecha y recuerda, además, que tiene planes para construir a largo plazo otros 20 reactores nucleares. El ministro de Exteriores iraní y jefe del equipo negociador, Mohamad Yavad Zarif, ha sugerido que estaría dispuesto a congelar durante varios años la capacidad de enriquecimiento actual o, incluso, a producir un tipo de uranio óxido que no puede ser utilizado en la fabricación de bombas atómicas.
También está por decidir el plazo del convenio, que Estados Unidos quiere que tenga una validez de al menos veinte años, mientras Teherán está dispuesto a comprometerse a cumplirlo, hasta ahora, durante unos siete años. Entre las necesidades más acuciantes de Irán están su reincorporación al sistema bancario mundial y el reinicio de sus exportaciones de petróleo y gas. La producción atómica de energía, liberaría para su exportación mucha cantidad de hidrocarburos que ahora se utilizan para generar electricidad.
LGC (dpa / EFE / Reuters)