¿Se encuentra enfermo? Estos remedios alemanes podrían ayudar

La primera señal de resfriado suele ser tener los pies helados. Por eso las medias y pantuflas tienen un lugar importante en el armario alemán. “A los alemanes les cuesta entender el concepto de pies descalzos”, indica la autora australiana Liv Hambrett en su libro “Lo que sé sobre los alemanes”. Aún no se comprueba si las medias de lana combaten los virus o si sirven solo como método paliativo.

La respuesta alemana a muchos de los problemas de la vida se encuentra en el sauna. Se dice que el uso correcto de las cabinas calientes y baños de vapor fortalece el sistema inmunológico. Aunque no es recomendable ir con fiebre, la Organización Alemana de Sauna indica que puede ayudar a combatir el resfriado, ya que el alternar calor y frio incrementa la circulación en la membrana mucosa.

Siguiendo el consejo de nunca dejar enfriar el cuerpo, los doctores alemanes siempre aconsejan aliviar problemas estomacales o dolores musculares con el uso de bolsas de agua caliente. Muchos dicen que el calor causa un incremento en la circulación, el cual rebaja la hinchazón causada por la indigestión. Eso si, mantenga siempre la bolsa cerrada para prevenir quemaduras.

El jengibre siempre ha estado presente en la medicina tradicional china y en la ayurvédica, donde se le reconoce por su capacidad de aliviar las náuseas y el mareo. En Alemania, el jengibre se prepara con frecuencia como infusión, rebanado o en cubitos. El efecto del picante puede aliviar el dolor de garganta durante un resfriado.

Mientras que los coreanos creen en las propiedades saludables del kim chi y el repollo fermentado, los alemanes recurren al repollo agrio (chucrut) como alimento necesario para la buena salud. Repleto de vitamina C y flavonoides, este plato popular es consumido todo el año por su poderío contra los virus, gérmenes e indigestiones.

El jengibre no es la única infusión que usan los alemanes para sentirse mejor. Dependiendo del padecimiento, se podría tomar la salvia, el orégano, la menta u otras hierbas para pasar el malestar. El sabor puede llegar a ser tan poco tentador como una medicina, pero al menos el té relaja lo suficiente para sentirse bien momentáneamente. “Gute Besserung” – ¡que se mejore!