Sanciones de Washington contra Irán: preguntas y respuestas

Este 5 de noviembre se abre la segunda etapa de sanciones de Washington contra Irán. Las nuevas sanciones apuntan a las exportaciones de petróleo y al sector financiero. 

¿Cuáles sanciones entran en vigor?

Todas las transacciones de petróleo con las compañías petroleras iraníes quedan prohibidas desde este 5 de noviembre de 2018. También están prohibidos los seguros de todo tipo, así como los transportes de petróleo. Las sanciones financieras existentes serán más estrictas: todas las transacciones con el Banco Central iraní quedan vetadas, pero también con otros bancos comerciales iraníes. Donald Trump calificó las sanciones como "las más duras de todos los tiempos".

Según la voluntad del gobierno de Estados Unidos, las exportaciones de petróleo de Irán deberán caer a cero. Y eso que el 80% de los ingresos estatales de Irán provienen de la venta de petróleo.

¿Qué sanciones ya están en vigor?

Tras la retirada unilateral de EE. UU. del Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), el 8 de mayo, Washington le impuso dos plazos a los socios de Irán para cerrar sus negocios: el primero de 60 días finalizó el 6 de agosto. Desde esa fecha, a Irán se le prohibió acceder al dólar estadounidense. También la fábrica de autos y alfombras, claves para la economía iraní, ha sido vetada. Teherán tampoco podrá comprar aviones. 

¿Cuál es el objetivo de las sanciones?

Un cambio de comportamiento del Gobierno iraní: Irán debe abandonar su programa de misiles, terminar el apoyo a grupos terroristas, incluidos el Hizbolá libanés, Hamás y la Yihad Islámica Palestina. Irán deberá también retirar todas las tropas bajo su mando de Siria, y desmovilizar a las milicias chiítas en Irak. La desestabilización de Irán y el cambio de régimen en Teherán es lo que, en definitiva, desea Washington.

¿Cómo reaccionan los demás socios del Acuerdo Nuclear?

Tanto los signatarios europeos del PAIC (Alemania, Francia e Inglaterra) como China y Rusia han condenado la salida de Estados Unidos y no quieren dar por perdidos los más de doce años de negociaciones. El objetivo del acuerdo se está logrando: evitar el peligro de la construcción de una bomba atómica iraní y, por lo tanto, una carrera nuclear en la región. El comportamiento de Irán en la región nunca fue parte del acuerdo.

El propio Irán quiere mantener el acuerdo, pero solo si puede disfrutar de los beneficios prometidos, sobre todo del intercambio económico. El Organismo Internacional de Energía Atómica ha confirmado que Irán cumple sistemáticamente con todas las regulaciones del PAIC.

¿Puede la UE resistir las sanciones unilaterales de Estados Unidos?

La Comisionada para Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, anunció la creación de una institución especial para manejar los negocios con Irán, un llamado "Vehículo de propósito especial (SPV)”. El SPV debería funcionar como una especie de bolsa de intercambio de productos: las compañías iraníes y europeas intercambian pagos en especies en esta cámara de compensación, como aceite por máquinas o textiles. Los flujos de efectivo ya no serían visibles en los mercados financieros internacionales.

¿Cuáles han sido los efectos de las sanciones, hasta ahora?

El rial, la moneda iraní, está en caída libre y ya ha perdido más del 70% de su valor en 2018. La inflación es galopante Las exportaciones de energía iraní han caído cerca de un tercio de su máximo en junio. La subida de precios del combustible en Europa ya está golpeando el bolsillo de los usuarios. Todo, debido a las sanciones de Estados contra Irán.

Varias empresas y bancos europeos se han retirado del mercado iraní y las transacciones se han casi paralizado, causándole muchos problemas a los pequeños y medianos productores en Europa e Irán. Hasta las medicinas vitales se han vuelto escasas y solo están disponibles a precios extremadamente elevados. Las sanciones fortalecen a las fuerzas ultraconservadoras en Irán, que criticaban el acercamiento a Occidente.

El rompimiento de Estados Unidos del Acuerdo Nuclear y las sanciones impuestas unilateralmente han profundizado la brecha entre Europa y Estados Unidos. Ahora, Europa, China y Rusia están unidos en un reclamo central contra Washington.

(JOV/CP)

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