Rummenigge lo considera justo
5 de noviembre de 2009En España los futbolistas tendrán que pagar en el futuro más impuestos, la famosa “Ley Beckham” será reformada y las estrellas internacionales de la Primera División tributarán el 43 por ciento de sus ingresos, en vez del actual 24 por ciento.
En Alemania la medida ha sido bien recibida; DW-WORLD conversó en exclusiva sobre el tema con Karl-Heinz Rummenigge, directivo del Bayern Múnich y presidente de la Asociación de Clubes Europeos (ECA por sus siglas en inglés) que representa los intereses de los 103 equipos más grandes de la UEFA.
DW-WORLD: Señor Rummenigge, el Gobierno español de José Luis Rodríguez Zapatero ha dispuesto eliminar las ventajas tributarias para extranjeros, contempladas en una legislación que le abrió la puerta de la Primera División a las más importantes y costosas estrellas del fútbol internacional. ¿Qué opinión le merece esta medida en su calidad de funcionario del Bayern Múnich y vocero de la ECA?
Karlheinz Rummenigge. En principio esa es una historia que sólo le compete a los españoles, ellos deciden de forma autónoma sobre la que era una ventaja tributaria para los clubes de fútbol. Gracias a ella pagaban la mitad por sus jugadores, como en el caso de Cristiano Ronaldo, al comparar las cargas del Real Madrid con las del Manchester United.
Esa ley era señalada como la causante de una distorsión de la competencia deportiva en Europa.
No, para mí no significaba una distorsión, era simplemente una ventaja que en Alemania no sería posible pues la gente pondría inmediatamente el grito en el cielo. Yo estoy muy lejos de criticar a los españoles por ese marco legislativo que todos disfrutaron, y que a nosotros –en Alemania y Europa- nos causaba dificultades pues pagábamos más. La reforma nos hará más competitivos ya que las cargas se igualan.
¿Quiénes se beneficiaron de ese régimen tributario?
Todos los clubes españoles, todos. Por supuesto para los más grandes como Real Madrid y Barcelona fue aún más lucrativo.
En España los clubes se quejan de que el fin de la “Ley Beckham” es también el fin de la calidad de la liga.
Yo entiendo a los colegas españoles pues lo que tenían era maravilloso, también entiendo sus preocupaciones, pero ellos tendrán que adaptarse a la nueva situación. No es fácil para ellos renunciar a condiciones favorables, pero esto no es el fin, yo no creo que se vaya a presentar una perdida dramática de calidad en la Primera División.
¿Qué significa para el mundo del fútbol la eliminación de las ventajas tributarias anunciadas en España?
Es un paso para Europa y el mundo en el propósito de igualar su fútbol; nosotros vivimos con esa desventaja y sabemos de qué estamos hablando. Para los futbolistas significará una disminución en sus salarios, pero ellos ya ganan suficientemente bien. Para los clubes los contratos ahora serán más caros.
¿Se debatió alguna vez en el seno de la ECA el tema de la “Ley Beckham”?
No, eso no estuvo nunca sobre la mesa de discusiones porque desde muy temprano se tomó la decisión que los temas tributarios y de derechos de televisión eran autónomos de cada liga.
¿Es esta la oportunidad para que Alemania retenga a sus estrellas, en su caso, el del Bayern Múnich, a Ribéry, tentado por Real Madrid y Barcelona?
No hay tantos jugadores de la Bundesliga que terminen en el fútbol español, el caso de Ribéry es una excepción y no la regla. Creo que ese efecto se sentirá mucho más en Italia e Inglaterra.
¿Es este un caso en el que la política se inmiscuye en los asuntos del deporte?
No, al fin y al cabo fue el mismo Gobierno el que creó esas ventajas, que los clubes españoles en su momento aclamaron y celebraron de la misma forma que ahora lloran ante la inminencia de la reforma. Es claro que en momentos de crisis financiera, como la que atraviesa actualmente el mundo entero, los países que sufren por ella, como es el caso de España, tienen que eliminar las subvenciones, y la "Ley Beckham” no era otra cosa que una subvención.
A Karl-Heinz Rummenigge, el hombre, no el funcionario ¿le gusta la medida?
La considero muy justa desde el punto de vista social. Aquí estamos hablando de beneficios para gente que gana mucho, muchísimo dinero, y se ahorraba una cantidad enorme de impuestos sin pensar en su responsabilidad social.
Usted es un muy buen amigo de Joan Laporta, el presidente del Barcelona, ¿ya tuvo la oportunidad de hablar con él sobre este tema?
No, aún no, pero seguramente lo haré en los próximos días y entonces le diré a él, al igual que a Florentino Pérez, que entiendo sus preocupaciones pero que mi convicción es que tanto Barcelona como Real Madrid seguirán siendo grandes clubes.
Autor. Daniel Martínez
Editor: Enrique López