Preparan cargos en Alemania contra Hartmut Hopp, prófugo de Chile
27 de agosto de 2011El círculo se cierra en torno a Hartmut Hopp, principal colaborador de Paul Schäfer en Colonia Dignidad, la secta alemana en el sur de Chile. A pesar de haber huido de Chile el 15 de mayo de 2011 para evitar enfrentar una condena a prisión como cómplice en el delito de abuso de menores, no todo está saliendo en Alemania como esperaba.
Nadie lo quiere en Krefeld y sus alrededores, en cercanías de Düsseldorf. Tras conocerse los antecedentes de Hopp, el ambiente entre los vecinos es de gran inseguridad y miedo. Así lo reconoce la inmobiliaria que le había arrendado una vivienda en Krefeld a partir del 1° de septiembre y que decidió cancelar el contrato. A pesar de la resistencia del matrimonio Hopp, el cual tenía las llaves en su poder desde el 15 de agosto, la decisión parece inapelable.
La mudanza desde su actual residencia en un pueblo cercano estaba prevista para el 31 de agosto. Padres de familia se están organizando y con volantes invitan a una manifestación este fin de semana en rechazo a la presencia del médico, frente a la que iba a ser su nueva casa.
Hopp, de 66 años, vive actualmente de la ayuda social estatal, con una pensión de unos 500 euros. Sin embargo, cuenta con fondos propios. De acuerdo a informaciones de la prensa local, habría pagado cinco meses de arriendo - por un valor de más de 500 euros mensuales- por anticipado y en efectivo. También estaría tramitando sus papeles para poder ejercer la medicina en Alemania.
“Son calumnias”
Como inocente de los cargos en su contra se declara Hopp. En una carta enviada al diario Westdeutsche Zeitung habla de la Justicia chilena y niega su complicidad o conocimiento de crímenes al interior de la secta.
“Yo no he abusado de menores, ni participado en violaciones de los derechos humanos, ni violaciones de leyes de ningún tipo”, comienza la misiva del médico, quien niega además complicidad o colaboración en estos delitos. “Todas las declaraciones que están tratando de manifestar lo contrario son calumnias”, dice.
A pesar de que INTERPOL tiene una orden de captura internacional en su contra, Hopp prefiere hablar de “regreso a Alemania” y no de fuga. Dice que no ejerció funciones de “ministro de relaciones exteriores” de Colonia Dignidad y argumenta que desde 1978, cuando llegó al complejo, se dedicó exclusivamente a ejercer la medicina. “Además, yo no poseo "importantes fondos" porque he pasado la mayor parte de mi vida, así como muchos otros empleados de Colonia Dignidad, trabajando en forma gratuita” y agrega que no tiene otros recursos que la pequeña pensión que recibe.
El ex jerarca critica el juicio en su contra, a cargo del ministro "en visita" Jorge Zepeda, diciendo que en este caso “la Justicia chilena no busca justicia, sino una o más víctimas”. También rechaza que la causa esté en manos de un “ministro en visita”, “una figura que proviene de un Código de más de cien años y que recuerda los tiempos inquisitoriales. Tener en frente a esta figura legal con toda su dimensión y las facultades de su cargo, es motivo de pánico”.
Centro de operaciones
En Krefeld, donde funciona la iglesia Freie Volksmission, liderada por el pastor Ewald Frank, se han radicado numerosos ex colonos. Aquí vivió otro ex jerarca, Albert Schreiber, quien murió sin haber respondido por los cargos en su contra. Desde hace unos años reside aquí el hijo adoptivo de Hopp y su familia - quienes se habrían alejado de éste -, y la ex contadora Erika Heimann.
Muchos ven en la iglesia de Frank una nueva secta con características similares a Dignidad, pero el pastor niega cualquier vínculo. En sus recorridos predicando por el mundo, visitó tres veces Colonia Dignidad, en los años 2004 y 2005 y realizó bautizos masivos, hasta que en su último viaje el gobierno chileno le negó indefinidamente el ingreso al país.
Frank aparecía entonces como un líder espiritual que podría llenar el vacío dejado por Schäfer, detenido hacía unos meses. En declaraciones a un diario chileno, Frank niega que dirija una secta y dice no tener contacto con Hartmut Hopp. Curiosamente, según informa el Westdeutsche Zeitung (WZ), la carta que el mismo Hopp mandó al diario fue enviada desde el fax de la Volksmission.
Crímenes de lesa humanidad
Un vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores alemán confirmó que hasta ahora no han recibido el pedido de extradición de Hopp, que la Justicia chilena habría emitido a principios de agosto. “Todo lo que sabemos es por la prensa”, dijo.
En todo caso, reiteró que ante esta petición, Alemania no tiene nada que hacer. La Constitución impide la extradición de ciudadanos para ser juzgados en otros países. El juez chileno Jorge Zepeda ha indicado que Hopp estaría siendo requerido por crímenes contra la humanidad, por lo que Alemania debería entregarlo. Sin embargo, el vocero aclaró que esta petición sólo es considerada cuando proviene del Tribunal Internacional de la Haya.
En otro ámbito, el diario WZ informó que una organización de derechos humanos está preparando una acusación contra el médico, quien a pesar de haber escapado de la Justicia chilena, podría finalmente enfrentar un proceso en Alemania.
Autora: Victoria Dannemann
Editor: José Ospina-Valencia