Preocupaciones atómicas
8 de noviembre de 2011El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) tiene pruebas de que Irán está desarrollando armas nucleares de forma sistemática. O al menos así lo informa el diario alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung, haciéndose eco de un informe del organismo internacional que está a punto de ser publicado.
El documento, que detalla los planes atómicos de Teherán, estaría ya en manos de los países miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y de Israel, informa el rotativo germano. Según el informe, Irán ha estado trabajando en un amplio y organizado programa para el desarrollo de armas nucleares, que incluye el enriquecimiento de uranio, así como la construcción de cabezas nucleares que podrían ser utilizadas en misiles iraníes y en el desarrollo de un complicado mecanismo explosivo capaz de provocar una reacción nuclear en cadena.
Por otro lado, el periódico estadounidense Washington Post afirma que Irán ha recibido ayuda de expertos extranjeros (entre ellos, en el pasado, de un científico soviético) para superar los obstáculos técnicos en el camino hacia las armas nucleares.
Reacciones y advertencias
El tenor del informe de la OIEA tuvo eco inmediato en Israel y los medios locales anunciaban conversaciones al interior del gabinete del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para preparar un ataque militar a las instalaciones nucleares iraníes. Como reacción a esto surgió una advertencia rusa: cualquier ataque militar contra Irán sería un grave error con consecuencias impredecibles.
"No hay solución militar para el problema nuclear iraní como tampoco hay solución militar para ningún otro problema del mundo moderno", dijo Seguei Lavrov, ministro ruso de Exteriores. Es más, de “retórica muy peligrosa” calificó el presidente ruso Dimitri Medvédev estos rumores.
“Una guerra no es un picnic”
La aclaración de Israel siguió poco después: "Una guerra no es un picnic; nosotros no queremos una guerra", afirmó en una radio israelí Ehud Barak, ministro israelí de Exteriores. Que Israel todavía no ha decidido realizar una intervención militar, afirmó a pesar de que “Irán, de un modo refinado, sigue intentando conseguir armas nucleares y le toma el pelo al mundo”.
Según Barak este informe, no obstante, ofrece una oportunidad para imponer "sanciones internacionales letales" contra Teherán: romper las relaciones con el banco central de Irán, prohibir las exportaciones de crudo y las importaciones de combustible serían las sanciones adecuadas.
Por otro lado, una posible guerra no le preocupa al ministro israelí, pues “Israel es la nación más fuerte de Cercano Oriente” y, en su opinión, un enfrentamiento no dejaría como saldo miles de muertos ni la destrucción de Jerusalén. Sin embargo, según analistas políticos, un ataque contra complejos nucleares iraníes podría provocar represalias muy disruptivas en el Golfo que afectarían las rutas comerciales y el flujo de petróleo y gas para las exportaciones.
¿Preparados para responder?
Por su parte, el ministro iraní de Defensa, Ahmad Vahidi, advirtió en contra de cualquier ataque militar contra sus complejos atómicos; éstos, según Teherán, están destinados a desarrollar energía nuclear con fines civiles. "Estamos totalmente preparados para responder firmemente a medidas tan tontas de nuestros enemigos", afirmó.
El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad,aseguró que Teherán seguirá adelante con su programa nuclear y amenazó a Israel y Estados Unidos de las graves consecuencias que tendría un ataque a su país."Deben saber que Irán no retrocederá ni un paso en su programa atómico", afirmó Ahmadineyad, según la agencia estatal iraní IRNA.
Con todo, que Teherán haya escondido sus actividades nucleares al OIAEA, que haya restringido su acceso a sus instalaciones y que se haya negado a suspender tareas que llevarían a la construcción de bombas atómicas, ha provocado cuatro rondas de sanciones de la ONU y medidas punitivas tanto de Estados Unidos como de la Unión Europea.
Autora: Mirra Banchón
Editor: Rosa Muñoz Lima