Con Lula o Bolsonaro, la derecha en Brasil tendrá el poder
14 de octubre de 2022El diario suizo Neue Züricher Zeitung (NZZ), en su informe titulado "¿Lula o Bolsonaro? En cualquier caso, la derecha brasileña llevará la voz cantante”, hizo hincapié en que muchos se estarían olvidando de los recientes resultados electorales de cara a la segunda vuelta el próximo 30 de octubre.
"Una cosa está clara: los conservadores obtuvieron una victoria aplastante en las elecciones generales. Un sorprendente número de candidatos apoyados por Bolsonaro o cercanos a él fueron elegidos gobernador, senador o diputado. A diferencia de las elecciones de 2018, cuando muchos políticos aprovecharon de manera oportunista la popularidad de Bolsonaro, ahora han ganado sus seguidores acérrimos”, explica el NZZ, citando al politólogo brasileño Fernando Abrucio.
Bolsonaro tiene un proyecto autoritario a largo plazo, según el experto: "Si gana, intentará proceder de la misma manera que lo hizo Hugo Chávez en Venezuela, cuando desmanteló paulatinamente la democracia. Hace años, Bolsonaro calificó de ejemplar la estrategia del autócrata venezolano. Sin embargo, si Lula gana las elecciones, las cosas tampoco le resultarán fáclies. Su Partido Laborista ganó escaños, pero en la Cámara de Representantes solo tiene una cuarta parte; en el Senado, apenas un poco más. Lula ahora tiene que acercarse a los partidos de centro y de derecha, no solo para ganar las elecciones, también para poder gobernar”, cita el medio.
¿"Ola rosa" en América Latina?
Sobre un panorama político más regional, el periódico alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ) resaltó que pronto 500 millones de latinoamericanos podrían vivir en una democracia gobernada por la izquierda. "Lo que estaba ocurriendo, según el corresponsal del New York Times Larry Rohter en 2005, era más una marea rosa que una roja. Tres cuartas partes de los entonces 350 millones de habitantes de Sudamérica vivían bajo un gobierno de izquierda. Y esta izquierda emergente, dijo, ya no estaba casada con el comunismo (rojo) del siglo XX, sino que era más moderada, más suave, es decir, rosa”, escribió.
"Rother señaló en su momento que los representantes de la ola rosa armaban un alboroto retórico, simpatizaban con el cubano Fidel Castro y estaban en contra de Estados Unidos, pero ejercían la razón económica. Nunca se les ocurriría nacionalizar empresas extranjeras. Lo que siguió es bien conocido: En Venezuela, Chávez nacionalizó más de mil empresas; en Nicaragua, Ortega resultó ser un gobernante autoritario. Muchos otros presidentes resultaron ser corruptos. Un rostro destacado de esta época fue el brasileño Lula da Silva. También él tropezó más tarde con escándalos de corrupción”, señaló.
La crisis de los misiles en Cuba
Por su parte, el rotativo Neues Deutschland recordó la crisis de misiles en Cuba , de hace 60 años, que provocó un duro enfrentamiento entre Estados Unidos y la Unión Soviética, y se desactivó en un momento decisivo. "El término ‘crisis cubana' está dando vueltas en vista de la guerra de Ucrania y las amenazas nucleares de Rusia. Hace exactamente 60 años, el mundo también estaba al borde de la guerra nuclear”, escribió el medio alemán.
"El 14 de octubre de 1962, aviones de reconocimiento estadounidenses detectaron misiles soviéticos en Cuba. A noventa millas de su propia puerta, el enemigo estaba construyendo misiles de medio alcance con cargas nucleares. Nikita Khrushchev, el hombre fuerte de Moscú en ese momento, quería hacer una movida estratégica en el ajedrez nuclear de la Guerra Fría”, agregó.
Pero, según ese diario, el presidente estadounidense John F. Kennedy, al principio fue acusado de debilidad porque no quiso tomar medidas de inmediato. Sin embargo, luego actuó con determinación. "El presidente anunció un bloqueo naval recién el 22 de octubre de 1962. Los buques de guerra estadounidenses se cerraron entonces como en un anillo alrededor de Cuba. La armada de barcos soviéticos se enfrentó a los buques de guerra de la US Navy en el Caribe. Cinco días más tarde, el conflicto parecía intensificarse y la Guerra Fría amenazaba con escalar. Pero el 28 de octubre, la crisis se resolvió. La URSS anunció que los misiles serían retirados inmediatamente”, resume Neues Deutschland.
(cp)