Prensa alemana: intimidación y represión en Venezuela
6 de septiembre de 2024El diario Tageszeitung, de Berlín, publica un artículo de opinión sobre el asedio a la oposición venezolana: "El gobernante de Venezuela, Nicolás Maduro, incrementa la presión sobre la oposición. Tras la detención de miles de personas que protestaban contra el fraude electoral, la Fiscalía ha emitido una orden de arresto contra Edmundo González Urrutia, quien se enfrentó a Maduro en las elecciones presidenciales de fines de julio. Desde hace ya semanas se oculta y no acudió a varias citaciones a declarar. Mientras Maduro no escatima esfuerzos para intimidar a la oposición en las calles o a través de la Justicia, su gobierno no ha presentado hasta hoy ninguna prueba de que ganó las elecciones, como sostiene. La oposición, en cambio, publicó en internet actas electorales para demostrar su triunfo, y precisamente por eso es blanco de una andanada de acusaciones de terrorismo.
El régimen chavista de Venezuela tiene entretanto una deshonrosa tradición de mantenerse en el poder contraviniendo todas las leyes, e incluso su propia Constitución. Pero ni siquiera Maduro había llevado a cabo un fraude electoral de una forma tan descarada. Maduro sabe que ni la oposición ni la comunidad internacional tienen ninguna herramienta seria para derribarlo del trono”.
El "delito” de González Urrutia
El periódico Tagesspiegel, también de la capital alemana, apunta: "Conspiración, usurpación de autoridad e incitación a la desobediencia. Estos son sólo tres de los delitos de los que se acusa a Edmundo González Urrutia. Por eso habría de responsabilizarse ante un tribunal… Pero él no acudió a ninguna de las tres citaciones. Porque sabe que, una vez en manos de la Justicia, prácticamente nadie podrá ayudarlo. Probablemente no tendrá un juicio justo.
Su delito, en realidad, fue desafiar al presidente venezolano, Nicolás Maduro, en las elecciones del 28 de julio. Todo indica que tuvo éxito. Todo, excepto el resultado que el Consejo Nacional Electoral de Venezuela anunció en la noche de los comicios. (…)
‘Hay personas que no buscan necesariamente el poder, pero, no obstante, hacen historia', dice Diana Luna, experta en América Latina de la Fundación Friedrich Naumann. ‘Edmundo González Urrutia es uno de ellos'. (...) Pero, a ‘Maduro le resulta difícil mostrar de forma creíble como antagonista a este hombre reservado y orientado a buscar consensos'. Precisamente por eso, la Justicia actúa ahora con mano dura, buscando posibles delitos.
‘Para Maduro es la salida más simple: ya ha perdido la batalla política, pero puede ganar la judicial, porque controla la Justica', dice Diana Luna. ‘Maduro quiere ver en la cárcel a González Urrutia, y también a María Corina Machado'”.
Una pequeña esperanza
El matutino Frankfurter Allgemeine Zeitung plantea: "Maduro no entregará el poder. Eso no es sorpresa. Desde que asumió el gobierno, hace más de 10 años, ni una vez ha pensado seriamente en eso. (…)
La comunidad internacional ha reaccionado en forma relativamente cautelosa, de seguro también porque recuerda el 'experimento' fallido de 2019. Entonces no reconoció la farsa electoral de un año antes, en la que no participó la oposición, y aceptó al entonces presidente del Parlamento, Juan Guaidó, como presidente interino. Hoy, todos están conscientes de que la decisión de un cambio de gobierno sólo puede venir del propio régimen.
Pese a todo el temor y la intimidación, queda un poco de esperanza. Se sustenta en la certeza de los venezolanos de estar mayoritariamente contra Maduro. Nunca eso había sido tan claro y evidente como ahora. Todos lo saben, incluso Maduro y sus secuaces. Se les nota. También ellos viven desde hace un mes con miedo a perder el poder.”
(cp)