Prensa alemana: Colombia y las preguntas clave para la paz
1 de julio de 2022El periódico alemán Neues Deutschland se refiere a la labor por la paz que desarrollan exguerrilleros en Colombia, en el marco de la presentación del Informe Final de la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la la Convivencia y la No repetición sobre el conflicto en Colombia, haciendo hincapié en la iniciativa Aulas de Paz:
"El moderno edificio de la Universidad de Santo Tomás está ubicado en el norte de Medellín. Su estructura es de vidrio, ladrillo rojo, acero y hormigón. Oscar Montealegre, un hombre vital, fuerte, de mediana estatura, espera frente a él. (…) ‘Actualmente somos 15 empleados permanentes, todos exguerrilleros o paramilitares. Algunos militares también forman parte de nuestra red, que está comprometida con una cultura de paz en Colombia', explica Montealegre. (…).
Hablar con las víctimas fue un punto de inflexión en su vida. Montealegre las enfrentó. Luego de la desmovilización de los grupos paramilitares entre 2002 y 2005, la ‘Ley de Justicia y Paz' garantizó a sus líderes penas cortas de prisión de un máximo de ocho años si cooperaban con el Poder Judicial. Montealegre lo hizo, dio testimonios detallados, contribuyó a la búsqueda de la verdad, también se enfrentó a las víctimas y participó en exhumaciones. Eso formó a este hombre, que tiene hoy 41 años. 'Las víctimas son mucho más abiertas que el Estado colombiano. Incluso hoy, tres años después, me invitan a la Fiesta Anual de la Memoria, dice Montealegre con entusiasmo. Eso es lo que quiere de todos los involucrados, y en eso se ha comprometido con Aulas de Paz y en los seminarios. Esto está dando sus frutos, como lo demuestra el creciente número de protestas estudiantiles en los últimos años. Incluidos algunos de la Universidad de Santo Tomás. El trabajo de la Comisión para el Esclarecimiento de la la Verdad, la Convivencia y la No repetición en Colombia, presentado el 28 de junio, también consultó a colombianas y colombianos en el extranjero, a fin de obtener un panorama detallado de la guerra brutal que dejó tantas víctimas”.
"30.000 testigos de un sufrimiento indecible”
Así titula el diario Die Tageszeitung (taz) un artículo sobre la presentación del Informe Final de la Comisión por la Verdad en Colombia:
"‘Hay futuro si hay verdad', se lee sobre la fachada del Teatro Jorge Eliécer Gaitán, en el centro de Bogotá. Dentro de la sala, hasta el último lugar está ocupado. A pesar de haber estado invitado, el presidente colombiano, Iván Duque, no se hizo presente. Está en unaconferencia de la ONU sobre los océanos, en Portugal. (…).
La Comisión por la Verdad tuvo cuatro años para sacar a la luz el horror. En el conflicto colombiano también participaron paramilitares y otros grupos armados. La Comisión busca la verdad escuchando a las personas, para descubrir los motivos y las estructuras responsables de décadas de sufrimiento en Colombia. Y para que ese sufrimiento no se repita. En su tarea, la comisión viajó, organizó miles de encuentros para recoger testimonios y propició la conciliación. Algunos tuvieron que cancelar su asistencia, ya que el conflicto armado aún no ha terminado. Más de 30.000 víctimas hablaron. Esta comisión es la primera que incluye a colombianos en el exilio, y que se enfoca en el aspecto étnico y de igualdad de género.”
"Documentos sobre el horror”
El matutino Der Tagespiegel aborda el informe de la Comisión de la Verdad resaltando la figura del sacerdote jesuita Francisco de Roux, de 78 años:
"'Los alemanes, dijo el padre jesuita y presidente de la Comisión por la Verdad, necesitaron generaciones para enfrentarse a lo que habían hecho durante la guerra. Pero cuando los alemanes se confrontaron como sociedad con su responsabilidad frente a seis millones de judíos asesinados, entonces Alemania se transformó y pudo reconquistar su dignidad y su futuro', dijo Roux a la emisora Caracol Radio.
La comparación con la Alemania nazi evidencia cuán graves considera Roux los crímenes cometidos durante el conflicto armado en Colombia, los cuales él y su Comisión por la Verdad revelaron a la opinión pública en varios cientos de páginas. 'Pedimos que se acepte la verdad de la tragedia', dijo de Roux.
Las cifras por sí solas son espantosas: más de 450.000 muertos, más de 100.000 desaparecidos, más de ocho millones desplazados por la fuerza de sus hogares, más de 50.000 secuestros y casi 17.000 niños soldados reclutados entre 1986 y 2016. ‘Pedimos reconocer a las víctimas y hacer posible el nunca más', enfatizó el sacerdote.
El Informe Final es un desastre para el Estado colombiano y su Ejército. Según los hallazgos de la Comisión, el 45 por ciento de las muertes pueden atribuirse a los paramilitares de extrema derecha, cuyas acciones a menudo fueron encubiertas por el Ejército regular (12 por ciento). Particularmente devastador para los militares es el pasaje sobre las ejecuciones extrajudiciales, resultado de una ‘práctica sistemática' para ‘eliminar al enemigo a toda costa', como dice el informe. El Ejército asesinó a miles de civiles inocentes y luego los disfrazó de guerrilleros para cobrar bonificaciones. En contraste, la exguerrilla de izquierda de las FARC es responsable del 21 por ciento de los asesinatos, y la todavía activa guerrilla marxista ELN, del 4 por ciento de ellos.”
(ms)