"Perdonazo" en el fútbol italiano

El gran escarmiento que se pretendía dar a los clubes y funcionarios del fútbol italiano que protagonizaron el bullado escándalo del arreglo de partidos quedó reducido a un castigo menor. En segunda instancia, el tribunal deportivo se mostró magnánimo y atenuó los castigos que habían sido impuestos por la corte el 14 de julio. En consecuencia, el único equipo condenado a bajar a la segunda división será el Juventus de Turín, en cuyas filas se encuentran varios de los integrantes de la "squadra azurra", ganadora del Mundial de Alemania.

Jueces compasivos

Aunque la "Juve" se verá además despojada de sus títulos de las dos últimas temporadas del fútbol italiano, los jueces también demostraron tener un corazoncito compasivo con el club: en lugar de partir ahora con 30 puntos en contra, sólo tendrá que remontar 17 para poder volver a la liga A.

Más suerte incluso tuvieron el Fiorentina y el Lazio, de Roma, que podrán mantenerse en primera división. Al primero se le restarán, sin embargo, 19 puntos y al segundo, 11, como castigo. Por último el AC Milán, que ya en primera instancia se había salvado del descenso, obtuvo una rebaja en la sustracción de puntos, que será de 8 en lugar de 15. El club de Silvio Berlusconi, que había sido primero condenado a no participar en las competiciones europeas, ahora sí podrá hacerlo, dado que el tribunal revocó esa sanción.

También la UEFA

Con un veredicto menos severo terminó también la apelación para varios funcionarios, como Franco Carraro, ex presidente de la Federación Italiana de Fútbol. En lugar de haber quedado inhabilitado por cuatro años, sólo deberá pagar una multa de 80.000 euros. En cambio, el tribunal confirmó en segunda instancia la sanción de 5 años de inhabilitación a los ex directivos de Juventus Luciano Moggi y Antonio Giraudo, ex director general y ex administrador delegado.

La benevolencia no sólo se hizo patente en el tribunal deportivo italiano, sino también en el marco de la Unión Europea de Fútbol (UEFA). A pedido de la federación italiana, se prolongó en un día la fecha tope para registrar a los clubes que intervendrán en los campeonatos continentales, hasta el viernes 26. ¿Qué más le podría pedir el fútbol italiano a la vida? Quizá que los jueces fueran menos condescendientes y velaran porque las prácticas mafiosas sean erradicadas efectivamente, de una vez y para siempre.