Bachelet al frente de ONU-Mujeres en Bruselas
25 de marzo de 2011En su primera visita oficial como directora ejecutiva de ONU Mujeres, Michelle Bachelet acudió a la comisión de la mujer en el Parlamento Europeo en Bruselas. A la pregunta de “¿cómo logró usted conciliar vida familiar y su brillante carrera política profesional?”, la ex presidente chilena respondió afirmando que en caso de haber sido hombre nadie le habría preguntado eso. Ella misma –pediatra, ministra de salud y de defensa, primera presidenta de Chile- es la prueba de que se puede; “pero es difícil”, confiesa. No obstante, la pregunta refleja la desigualdad entre los géneros; combatirla es el objetivo de la entidad de Naciones Unidas creada a mediados del año 2010. Empoderamiento es la palabra clave.
Violencia contra las mujeres
“Un 20 por ciento de las mujeres europeas ha sufrido violencia en relaciones cercanas”, afirmó Bachelet en diferentes encuentros, resaltando que no se trata de un fenómeno sólo de América Latina, cuyos casos de feminicidio han hecho sonar las campanas de alarma. “Es una pandemia”, decía la ex mandataria chilena. Combatirla requiere de una aproximación por varios lados que pasa por el reforzamiento de la ley.
Por mucho tiempo, dijo Michelle Bachelet, este tipo de violencia si bien ha sido castigado, no ha sido considerado como un crimen. “Esto tiene que cambiar”, agregó en la sesión de la Comisión de la Mujer, con escasa presencia masculina. “Tiene que cambiar no sólo por lo que representa para el desarrollo humano, sino también por motivos económicos. Se calcula que en India, un hecho violento contra una mujer le cuesta a ésta una ausencia de cinco días al trabajo”, explicó.
La estrategia para acabar con esta “pandemia” debe incluir el refuerzo de las leyes, medidas de prevención y la presencia de los hombres”, afirma. Para esta estrategia de la recién nacida agencia de Naciones Unidas, la cooperación de la Unión Europea está asegurada, afirmó por su parte el comisario europeo para Desarrollo, Andris Piebalgs.
Símbolos de poder
Para junio de 2011 anuncia Bachelet -que en 2008 estaba en la lista de las mujeres más poderosas del mundo- un plan de acción. En éste estarán comprendidas acciones para promover la participación de la mujer en procesos de paz. “La creación de símbolos es muy importante cuando se trata de empoderamiento de las mujeres”, subrayó la ex ministra de Defensa: en Liberia la impresionó la presencia de un batallón de mujeres, con uniformes y armas; en el Cairo, las mujeres en la plaza Tahir. Aportar a que esa presencia continúe lo ve Michelle Bachelet –quien en 2002 impresionó a su país dirigiendo operaciones de emergencia desde un tanque- como uno de sus retos. “No estoy hablando de distribuir armas”, dijo sonriendo, “sino de que las mujeres tengan poder”, dice citando el caso de Nepal, donde después del conflicto, en el que las mujeres fueron decisivas, pudieron participar directamente en las negociaciones posteriores.
Más poder económico para ser escuchadas
Así, echando una mirada corta al empoderamiento de las mujeres de las minorías étnicas en América Latina, la ex presidente chilena habló de que su exclusión tiene que ver con la pobreza ligada a la segregación de las zonas rurales. “A esas mujeres se las puede incluir aportando a su formación y apoyando el acceso de sus productos a los mercados. Pero más que decirles a los países lo que tienen que hacer, pretendemos apoyarlos en los proyectos que ellos mismos generen”, respondió a DW la popular - y en círculos europeos tan admirada- estadista que pone en su ambiciosa lista de metas el lograr incrementar la voces y el liderazgo femenino y que ve en los logros de Noruega con su cuota del 40 por ciento en cargos directivos un buen ejemplo.
Autora: Mirra Banchón
Editor: Pablo Kummetz