Ordenan exhaustiva investigación de Fuerzas Armadas alemanas
24 de enero de 2011Karl-Theodor zu Guttenberg ordenó una investigación integral de las Fuerzas Armadas alemanas, tanto del Ejército como de la Marina y la Fuerza Aérea, en respuesta a una serie de incidentes ocurridos recientemente. Entre ellos, figura un presunto motín a bordo del buque escuela Gorch Fock, la muerte de un soldado en Afganistán y reclamos sobre violación de la correspondencia de los soldados.
El ministro dijo que se examinaría si ha habido casos en los que “pudiera haber una relación entre una excesiva presión sobre las tropas y la ruptura con los principios básicos del mando interno”, tal como un manejo irresponsable de las armas.
Guttenberg dijo que cree que los problemas recientes son sólo incidentes aislados. “Pero estoy dando un paso decisivo para enfrentar a todos aquellos que sospechan que en las Fuerzas Armadas se están cometiendo errores”, señaló el ministro al periódico Bild am Sonntag.
Rumores de amotinamiento
Guttenberg se halla bajo presión debido a las críticas que tuvo que enfrentar por una serie de sucesos que pesan sobre su ministerio, y la canciller alemana, Angela Merkel, salió a manifestarle su respaldo públicamente.
Varios miembros de la oposición socialdemócrata, entre otros, el ex ministro de Exteriores, Frank Walter Steinmeier, acusaron a Guttenberg de dañar la imagen de las Fuerzas Armadas en su totalidad por no reaccionar a tiempo a los problemas que acosan a dicha institución.
“Queremos que esos problemas se resuelvan y, al final, cuando hayamos establecido el rol del ministro de Defensa en esos casos, tendremos que hablar sobre el mismo ministro de Defensa”, dijo Steinmeier a la televisión alemana.
El viernes pasado, Guttenberg destituyó al comandante del navío escuela Gorch Fock luego de que se dieran a conocer detalles sobre un accidente fatal a bordo del mismo, en el que falleció una joven cadete, así como denuncias sobre acoso sexual y maltratos.
En noviembre de 2010, una joven cadete de 25 años falleció al caer de uno de los mástiles mientras realizaba ejercicios en el Gorch Fock. A este episodio le siguieron informes de amotinamiento de cadetes, que denunciaron estar siendo maltratados por sus superiores, y también hubo denuncias aisladas de abuso sexual.
Guttenberg ordenó que el buque, anclado en el puerto de Ushuaia, en el sur de Argentina, retornara de inmediato a puerto alemán y permaneciera allí por tiempo indefinido, hasta tanto se desarrollen las investigaciones.
Soldado muerto en Afganistán
El caso del Gorch Fock no el único escándalo en el ministerio de Defensa que ocupa los titulares de periódicos alemanes. También el despacho de Guttenberg fue acusado de manipular información acerca de la muerte de un soldado en Afganistán en diciembre de 2010. Luego salió a la luz que fue un camarada el que disparó por error matando al joven.
De acuerdo con Guttenberg, él “no tiene nada que reprocharse” en cuanto a dicho incidente, e insistió en que actuó correctamente informando a la opinión pública al día siguiente de ocurrido el lamentable accidente.
El ministerio de Defensa explicó que no podía comentar en los reportes que el soldado había estado “jugando” con su arma en el momento del accidente. Un vocero del ministerio admitió que se había demorado en transmitir a Guttenberg el acta policial militar correspondiente. Este suceso hizo que se cuestionaran posibles fallas en la comunicación interna dentro del ministerio.
Manipulación de correspondencia
En otro caso, soldados alemanes estacionados en Afganistán denunciaron que las cartas que enviaban a sus familiares habían sido abiertas. El Ombudsman de las Fuerzas Armadas en el Parlamento alemán, Hellmut Königshaus, alegó que la correspondencia enviada desde un puesto fronterizo en las cercanías de Mazar-i-Sharif había sido “sistemáticamente” abierta y que se habían sustraído algunas piezas.
Por su parte, el vocero de la canciller alemana subrayó que cualquier tipo de manipulación de correspondencia era “un asunto serio”.
“Si la investigación resulta en que cualquiera de estas cosas se realizó de manera deliberada, es obvio que habrá sanciones”, comentó Guttenberg al respecto.
Unos 4.700 soldados alemanes permanecen estacionados con las Fuerzas Internacionales de Asistencia para la Seguridad (ISAF) en Afganistán. El departamento de correos de las Fuerzas Armadas declaró que se transportan cerca de 200.000 envíos por mes entre Alemania y las unidades militares en el extranjero.
Autora: Joanna Impey/ CP
Editor: Pablo Kummetz