Orbán causa polémica en el Parlamento Europeo

Por la mañana, antes del discurso de Viktor Orbán, algunos europarlamentarios habían dejado en claro lo que piensan del primer ministro húngaro. Políticos socialdemócratas, liberales, izquierdistas y verdes, levantaron pancartas con el slogan "demócratas en lugar de autócratas".

En la sala de plenarios, Orbán presentó el programa de su presidencia del Consejo, que detenta desde julio. Enumeró los muchos encuentros que ya han tenido lugar bajo la presidencia húngara, anunció un nuevo "acuerdo para la competitividad" y defendió, por ejemplo, una reducción de las regulaciones.

Igualmente, anunció que abogará por cumbres regulares de Schengen, en que los integrantes de ese espacio discutan sobre la forma en que funciona. Además, consideró que habría que cuestionar la política europea de medio ambiente, si esta conduce a la pérdida de puestos de trabajo.

Orbán y la política de asilo

Al abordarse el tema de la migración, se percibió mayor intranquilidad en la sala. Orbán quiere erigir puntos fuera del área de la UE para examinar los casos, de manera que sólo puedan entrar a territorio comunitario las personas que tengan una autorización válida.

"El sistema europeo de asilo simplemente no funciona. La migración ilegal conduce al antisemitismo, la violencia contra las mujeres y un aumento de la homofobia", dijo el populista de derecha. La Unión Europea acordó el año pasado una reforma de la política de asilo, que aún debe entrar en vigor.

Hungría fue condenada en junio de este año por el tribunal de la UE, por no atenerse a las reglas de asilo del bloque. La corte le aplicó una multa de 200 millones de euros y un millón de euros adicionales por cada día que siga sin cumplir las disposiciones. Además, el país tendrá que enfrentar ante la corte acusaciones de discriminación de la comunidad LGBTIQ+. Por otra parte, la Comisión Europea mantiene retenidos fondos para Hungría, debido a reparos sobre el Estado de derecho en el país.

Duras críticas de Von der Leyen

Poco después de asumir la presidencia del Consejo de la UE, Orbán visitó a Vladimir Putin por cuenta propia en una "misión de paz", que le valió duras críticas en la UE. Manfred Weber, presidente del bloque conservador del Partido Popular Europeo (PPE), afirmó en el debate de este miércoles 9 de octubre que ese viaje fue "un gran espectáculo de propaganda". Además, dijo estar consternado por el hecho de que Orbán no haya mencionado siquiera a Ucrania en su discurso de hoy.

Muchos consideran a Hungría como "el más estrecho aliado de Rusia" dentro de la UE. En el pasado, el país bloqueó ayudas a Ucrania. "Todavía hay algunos que no culpan de esta guerra al agresor, sino al agredido. No ven la causa en la avidez de poder de Putin, sino en la añoranza de libertad de Ucrania", afirmó Ursula von der Leyen.

Además, criticó que Hungría se aferre a los combustibles fósiles de Rusia y que siga apartándose del mercado interno europeo, ya que empresas europeas son discriminadas en el país.

Acusaciones de corrupción

Desde las filas parlamentarias europeas, se manifestaron acusaciones de corrupción y vulneraciones del Estado de derecho. Por ejemplo, la socialdemócrata húngara Klara Dobrev reprochó a Orbán gobernar mal el país y venderlo a los oligarcas rusos.

El parlamentario verde Daniel Freund llamó a Orbán "dictador", y "uno de los políticos más corruptos de la Unión Europea". Afirmó en el pleno que él y sus aliados roban dinero de la UE y que ya se han esfumado por lo menos 14.000 millones de euros. Freund explicó a DW que había calculado esa suma sobre la base de un estudio de la ONG Transparencia Internacional.

También Valerie Hayer, presidenta del grupo liberal Renew, dijo que Orbán había construido su sistema con una modalidad de "estafa" que estaría costando una fortuna a los contribuyentes húngaros y europeos.

Aplausos desde el extremo derecho

Orbán recibió, en cambio, aplausos de dos grupos del extremo derecho del abanico político: "Patriotas por Europa", del que es cofundador,y la fracción "Europa de las Naciones Soberanas" a la que pertenece el partido Alternativa para Alemania (AfD).

En sus palabras finales, Orbán se defendió con vehemencia de las críticas de los parlamentarios. A Ursula von der Leyen le reprochó utilizar la Comisión Europea como arma para la lucha contra su grupo de "Patriotas por Europa".

(ers/rml)