Onda de calor azota hemisferio norte

En España y Portugal la onda de calor ha provocado la muerte de 12 personas y se espera que la temperatura en la península Ibérica se mantenga alrededor de los 40 grados centígrados. Las autoridades portuguesas, abrumadas por la peor ola de incendios que azota al país desde hace 20 años, ha pedido ayuda internacional ante la falta de medios para combatir lo que el presidente Jorge Samapio ha calificado como catástrofe nacional.

Desde hace una semana Portugal sufre una ola de calor con temperaturas que superan los 40 grados, lo que ha ayudado a propagar incendios desde el norte al sur del país. Unos treinta incendios activos obligaron a las autoridades a evacuar numerosas localidades, la población se encontraba en estado de pánico. "El centro del país en llamas", rezaba el titular del periódico portugués "Público". Unos 1500 bomberos luchaban por controlar los incendios que han devastado ya más de 26.000 hectáreas en todo el país. El ministro del Interior, Antonio Figuereido Lopes, quien asumió personalmente la dirección de los operativos de extinción, se vio obligado a pedir ayuda a los países de la Unión Europea. Son necesarios sobre todo hidroaviones.

En España, distintas regiones del país han sido afectadas por incendios. En Madrid se registraron las temperaturas más altas de los últimos 10 años, al superar los 41 grados centígrados. El fuego azotó con especial crudeza la comunidad de Extremadura. Las autoridades convocaron un gabinete de crisis y establecieron el estado de alarma de grado dos. 750 pobladores de distintos municipios de la zona fueron evacuados este fin de semana. Las autoridades prevén que continuarán las tormentas secas y las altas temperaturas lo que aumenta el riesgo de que se produzcan incendios. La línea férrea que une Portugal con España quedó cortada al haberse fundido las traviesas de la vía bajo las llamas.

Vientos desérticos del Sahara

En Alemania los meteorólogos pronostican que la onda de calor alcanzará los 40 grados a mediados de semana. El frente de alta presión "Michaela" cubría con su manto de calor las costas del Mar del Norte y arrojaba hacia el norte vientos provenientes del Sahara. Mientras que hace un año hubo devastadoras inundaciones récord, este verano no hay señales de lluvia. Los expertos hablan de un verano de temperaturas extremas récord. El sector turístico celebra la onda de calor, pero el clima encierra peligros para la población. Un niño de siete años se ahogó el fin de semana en el río Rin, al ser arrastrado por la corriente. Las autoridades alemanas advierten que los bajos niveles de los ríos representan un particular peligro, pues el comportamiento de la corriente es engañoso.

La peor sequía de Europa redujo al poderoso río Danubio a su nivel más bajo de un siglo. En el este de Serbia, un viejo barco de guerra alemán emergió lentamente a la superficie, convirtiéndose en una atracción para los residentes y turistas. Su proa, severamente dañada, salió a la superficie en un accidentado tramo de la principal vía fluvial de Europa. El verano pasado el Danubio, que atraviesa 10 países llegó a su nivel más alto en décadas. Los desbordamientos provocaron inundaciones en amplias regiones de Europa Central.

Norte del hemisferio afectado

Las altas temperaturas prácticamente han paralizando la vida en amplias zonas del norte del hemisferio. En Canadá se han registrado los peores incendios de los últimos 50 años. Sin embargo, pese a que la sequía ha afectado particularmente los bosques, la mitad de más de 350 incendios registrados han sido provocados intencionalmente. En China, la luz eléctrica escasea, pues el aire acondicionado funciona sin parar al máximo nivel en todo el país, consumiendo grandes cantidades de energía.