Nuevos modelos para el futuro de la música

Atrás quedaron los tiempos en los que los melómanos buscaban discos de grupos independientes en pequeñas tiendas atendidas por "gurús" de la música. Desde la aparición del Internet, la industria del entretenimiento tuvo que adaptarse a nuevos modelos. Y tanto videos, como "singles" o discos enteros están ahora al alcance del usuario a golpe de clic.

Comunicación e intercambio interactivo

Actualmente, el internauta consigue crearse una red propia dentro de la red de redes. Con sus diarios en forma de blogs se convierten en narradores de la actualidad (o de su actualidad). Y con enlaces, participación en foros, y salas de chats, consiguen crearse su grupo de amistades. Con espacios como Myspace, la música avanza rápidamente por Internet y con poco esfuerzo se transmiten videos de Youtube, MP3 de los hits del momento, películas o animaciones.

Sin embargo, los amantes de lo clásico todavía no deben temer por el final de los soportes musicales tradicionales. Como Johann-Friedrich Brockdorff, de la Asociación Fonográfica Alemana , comenta: "la venta de singles en formato CD es cada vez menor. Pero los álbumes completos en CD se mantienen y no es de esperar que desaparezcan del mercado".

Del mercado ilegal al negocio

Con el nuevo modelo de negocio, pronto aparecieron las bolsas ilegales de intercambio de archivos con las consiguientes perdidas millonarias para la industria. Pero adaptándose a los tiempos, y tras sucesivas penalizaciones legales de estar prácticas, las discográficas también supieron sacar beneficio.

Rápidamente comprendieron que las nuevas herramientas de la red podían ser también usadas para el mercadeo y como soporte de ventas. Y las primeras plataformas de intercambio como Kazaa pasaron a convertirse en su mercado. Un mercado con un espacio para que el usuario comente su música preferida, haga publicidad de discos a "su cibergrupo", e intercambie archivos de música. Pero ahora con una pequeña diferencia: hay que pagarlo.

Como modelo de negocio relativamente reciente, el porcentaje de la industria en Internet es todavía muy bajo: 2% con tendencia al alza. Pero los beneficios obtenidos por esta vía no son nada despreciables. Según Brockdorff, el 10% de las ventas de música se producen a través de descargas en Internet. Aún así, el intercambio ilegal de datos continúa provocando pérdidas de 500 millones de euros anuales. El camino será largo, pero como dice Brockdorff, la industria continuará persiguiendo estas prácticas ilegales.

Web 2.0

Internet avanza a toda velocidad y con ella todos sus modelos de negocio. Cuando estamos ante una nueva etapa con la Web 2.0, la industria todavía no anticipa sus estrategias. Cada empresa está pendiente de desarrollar su modelo. Pero una cosa es bastante probable: "mayor velocidad y más fácil para el usuario", opina Brockdorff. Hasta entonces, continuarán los intercambios a 99 céntimos por canción.

¿Cómo se imagina el usuario la nueva etapa de la industria musical en Internet? Esta vez es DW-WORLD la que ofrece a sus lectores un espacio para compartir su opinión sobre el futuro de la música. Nos puede mandar su respuesta a la pregunta de abajo.