Nueva Ley de Inmigración en Alemania
29 de diciembre de 2004
Tras largas negociaciones, el gobierno y la oposición aprobaron este año la nueva Ley de Inmigración que entrará en vigor a partir del primero de enero. La ley fue planteada debido a las obsoletas estructuras de la sociedad alemana y la necesidad de fuerza laboral más joven para mantener la economía. Sin embargo, creció el temor entre los políticos de que aumentase la alta tasa de desempleo.
Ventajas para los nuevos inmigrantes
El acceso a puestos de trabajo seguirá cerrado para los ciudadanos de países no miembros de la Unión Europea (UE). Sólo a través de reglamentos especiales, como acuerdos estatales bilaterales para trabajos de temporada, podrán optar a un puesto de trabajo. También los trabajadores procedentes de los países recién incorporados a la UE tendrán que esperar. Será dentro de siete años cuando tengan derecho a un puesto laboral en Alemania.
Más ventajas tienen los trabajadores altamente cualificados, independientemente de donde procedan. Según la legislación actual tenían que abandonar Alemania pasados cinco años. Con la nueva legislación tendrán derecho a quedarse y seguir trabajando.
Los extranjeros licenciados en una universidad alemana tendrán también derecho a quedarse un año en Alemania una vez terminados los estudios. En este periodo están obligados a encontrar un trabajo si quieren permanecer en el país. Otro colectivo beneficiado son los trabajadores autónomos, que recibirán permiso de trabajo bajo la condición de invertir un millón de euros y crear 10 puestos de trabajo.
Además de más derechos, la nueva ley contempla mayores facilidades burocráticas a la hora de solicitar permisos. Tanto el permiso de residencia como el de trabajo serán tramitados por la misma oficina, agilizando así el proceso de solicitud.
Fomento de la integración
El texto legal está también marcado por la deficiente integración de los más de siete millones de extranjeros que viven en Alemania. Los nuevos solicitantes tendrán derecho a cursos de alemán y a participar en una introducción sobre cultura, derecho e historia de Alemania. Para esto, el estado gastará 200 millones de euros. También los extranjeros aquí residentes pueden ser obligados por la administración a participar en los cursos. El que rechace esta oferta, podría perder su derecho a ayuda social y a prolongar la residencia.
Hasta ahora, únicamente los colonos de origen alemán, sobre todo procedentes de la antigua Unión Soviética, tenían derecho a estos cursos. Para ellos también existen nuevas reglas. Los familiares tendrán que pasar un examen de idioma para optar a la residencia.
Regulación del asilo más específica
Los solicitantes de asilo contarán a partir de enero con algunos cambios legales en su situación. Por primera vez, la persecución estatal y no estatal, y la persecución por razones de sexo está específicamente regulada. Quien no cuente con mecanismos legales para defenderse en su país de origen, tendrá derecho de asilo. Así lo tendrán por ejemplo las mujeres sobre las que pende la amenaza de ablación genital.
Entre los asilados actualmente residentes cuya condición no fue admitida, sólo unos pocos se beneficiarán de la ley. Todos aquellos que lleven más de cinco años en el país y por razones jurídicas no pueden ser deportados podrán permanecer provisionalmente en Alemania. Cada seis meses tendrán que renovar su estatus de asilado.
Los que si tendrán más problemas para entrar en el país son los potenciales terroristas. Ellos se enfrentarán a una inspección antes su entrada al país. Aquel sobre el que penda la sospecha de terrorismo o traficante de personas, podrá ser fácilmente expulsado.