Ni vea el éxito que ha tenido
28 de marzo de 2007
Beiersdorf es un consorcio internacional que ofrece sus productos en casi todos los países del mundo. Aunque por el momento Europa sigue siendo su principal mercado con dos terceras partes de las ventas, el ritmo de crecimiento es mayor fuera de las fronteras europeas.
Nivea para los chinos
Los mercados del futuro se llaman Rusia, Brasil, India y China, en donde registró un incremento de ventas del 45 por ciento en el 2006. La nueva estrategia de mercadotecnia de Beiersdorf no se concentra en primera línea en la venta de sus cremas, sino en el tema belleza. La meta es convertir a la empresa en el dios de la piel y la belleza.
El consorcio germano, filial del Grupo Tchibo, propiedad de la familia Herz, no compite ni lejanamente con gigantes como el estadounidense Procter & Gamble o Unilever, pero se ha propuesto darles guerra.
Beiersdorf cotiza entre las 100 empresas alemanas que componen el índice DAX. Concentra actualmente el 4,5 por ciento del mercado mundial de los cosméticos y su meta declarada es conquistar en el corto plazo el 5,5.
La princesa entre sus productos es sin duda la blanca Nivea, pero ofrece mucho más. Le pertenecen marcas igual de conocidas como Eucerin, el desodorante 8x4 y las curitas o tiritas Hansaplast. Además abarca otras áreas que no tienen nada que ver con la belleza: Tesa, las cintas adhesivas, le ingresa casi 800 millones de euros anuales.
Todo comenzó con una curita
Paul Beiersdorf de Brandenburgo abandonó su pueblo para hacerse cargo de una farmacia en Hamburgo. Ofrecía además de medicamentos al público sus servicios de laboratorio a doctores. Conjuntamente con el dermatólogo Paul Gerson Unna desarrolló un parche medicinal el cual patentó el 28 de marzo de 1882. Este fue el inicio. Como sucede con muchas historias, el nombre del auténtico héroe no goza de tanta fama.
El verdadero fundador de lo que sería el gigante alemán de los cosméticos fue el farmacéutico Oscar Troplowitz quien compró en 1890 la empresa a Beiersdorf. Dos años después construyó una fábrica en Hamburgo en donde sigue estando la central del consorcio. Troplowitz un empresario de cuento -recortó la jornada laboral de los trabajadores a 48 horas semanales y fue uno de los primeros en pagar aguinaldo y vacaciones- es el creador del Labello que usted seguramente lleva en el bolso y de la Nivea que probablemente tiene en el baño.
La madre de las cremas
En 1911 comenzó la venta de Nivea, la primera mezcla estable de agua y aceite en un producto corporal y algo así como la base de todas las cremas. Esta mezcla combinada con la lata azul de letras blancas se convirtió en un hit mundial, un clásico que casi todos conocen.
Desde entonces se han desarrollado un sin fin de nuevos productos, para el cuerpo, para el cabello, cremas de rasurar, cremas para el sol, tintes de cabello, sombras y más: la marca Beiersdorf se encuentra entre los top 100 de la cosmética.