Navidad: una mezcla de creatividad y tradición

No viene del Polo Norte, pero este Santa Claus, o Papá Noel, sí que es del norte de Alemania. Al menos, su moto está matriculada allí, en Celle. Por cierto, la escasez de mano de obra cualificada en Alemania también afecta a su sector. Desde hace años, las agencias se quejan de que podrían emplear a muchos más Papás Noel de los que se presentan. Así que estos niños tienen suerte..

Todo el mundo puede participar en la carrera de Papá Noel en México, incluso los menos entrenados. Dependiendo del estado físico y la motivación, la distancia es de diez, cinco o solo un kilómetro. La inscripción para la "Carrera de Papá Noel" cuesta entre 15 y 40 euros. Esto incluye el disfraz y un donativo para regalos destinados a niños de familias socialmente desfavorecidas.

La "Krampus Run" también es una tradición relativamente nueva y se celebra en Whitby, en el norte de Inglaterra, desde 2015. El hombre-cabra Krampus es la versión local de Knecht Ruprecht, que castiga a los niños malos mientras San Nicolás da regalos a los buenos. La víspera de San Nicolás, se recogen donativos para los necesitados en el Baile del Krampus.

En la metrópolis cultural brasileña de Río de Janeiro, actores negros se disfrazan de Papá Noel y ángeles de Navidad para celebrar con los niños de las favelas de la ciudad. La organización Favela Mundo quiere promover la diversidad y la inclusión.

El "Belén de Navidad" es una tradición en muchos países. Para los alemanes, el nombre es algo confuso, porque no se trata solo de una artesa llena de paja, sino de toda la Sagrada Familia, el buey y el burro, los pastores y las cabras, así como otros testigos del nacimiento de Cristo. En Las Palmas, en la isla atlántica española de Gran Canaria, los artistas moldean belenes de arena.

El árbol de Navidad, normalmente una conífera decorada con luces de colores, es originalmente una tradición alemana. Se dice que se remonta al reformador Martín Lutero (1483-1546). La Iglesia católica, contra la que Lutero arremetió, lo adoptó hace tiempo. Este ejemplo se encuentra delante de la catedral de Milán. La costumbre existe hoy en todos los continentes.

El pastel de Navidad que este Papá Noel lleva por una piscina del Sunshine Aquarium de Tokio, la capital japonesa, es una tradición en Japón desde hace varias décadas. Allí, el 24 de diciembre es más parecido al San Valentín americano-europeo, y la Navidad es una celebración de alegría entre amigos. El cambio de año, en cambio, se celebra de forma más contemplativa, en el seno de las familias.

Issa Kassissieh se disfraza de Papá Noel desde 2007. En su casa de la Ciudad Vieja de Jerusalén, hay un buzón para las listas de deseos. Visita a los niños en escuelas y hospitales montado en su camello. No le importa de qué religión sean, declaró el palestino al diario "Tagesspiegel", su misión es unir a todos: "Si hay paz en Jerusalén, se extenderá por todo el mundo".