Navidad en Alemania: 1945-2015

Millones de árboles están, en estos precisos instantes, adornando las salas de estar de los hogares alemanes. Aunque originalmente bastaba con un abeto sencillo, en la actualidad cada vez más gente busca un abeto noble. En términos de decoración, no hay límites: sirven velas, estrellas y pequeñas figuras. En navidad, no solo los ojos de los niños se llenan de alegría. Claro que no siempre fue así.

La primera Navidad después de una guerra devastadora fue celebrada en un país en ruinas. Refugiados y personas sin casa vagaban por las calles. Los soldados estadounidenses veían a una población apática y resignada. Esta revista parece sugerir otra realidad, pero lo cierto es que la mayoría de la gente se preguntaba dónde podría encontrar algo para comer.

1946-1949, años de hambruna. Organizaciones de beneficencia distribuían regalos, chocolates y dulces entre los niños durante estos difíciles momentos de la historia alemana. La falta de comida y de hogar hizo que la gente afinara el sentido de comunidad. Muchos hacían enormes esfuerzos para celebrar en grupo, aunque fuera con poca comida en la mesa. Hasta los regalos más humildes eran apreciados.

Cuando el boom económico llegó a Alemania Occidental, las celebraciones se volvieron más suntuosas. La mayoría de los presentes eran prácticos, como ropa o artículos de cocina, pero los niños empezaron a recibir juguetes nuevos. Aunque el café era un lujo, el de la RFA era mejor que el de la RDA. Quienes tenían familia en el Este, les enviaban paquetes con artículos de primera necesidad.

1950-1959: Alemania Oriental, la antigua República Democrática de Alemania, está desarrollando su visión socialista sin contrapesos. Y como esa ideología y el cristianismo no se avienen del todo, la Navidad es despojada de su religiosidad, tal como intentaron los nazis en su momento. Y así, la fiesta se convirtió en una celebración familiar llamada "Festival de Fin de Año" o "Festival de la Paz".

1960-69: Las postales navideñas de la República Democrática de Alemania muestran, por instrucción oficial, motivos del folclore en lugar de escenas cristianas. Pero los tallados en madera siguen siendo muy populares, incluso en la RDA. Es por ello que rápidamente se convirtieron en uno de los productos de exportación estrella del estado socialista.

1960-1969: En la Alemania Federal, el período de reconstrucción está llegando a su término y la prosperidad crece. Los regalos navideños son cada vez más valiosos y caros, como por ejemplo artículos tecnológicos o bienes de lujo. Más y más gente critica el nuevo espíritu consumista que erosiona las raíces de la festividad.

1970-1975: Como resultado de la cultura de dar regalos, la Navidad se vuelve rápidamente la festividad más importante del año. Es una posición que, en un sentido teológico, no debiera tener, considerando que el Viernes Santo o la Pascua son fechas más significativas. Pero, en realidad, el sentido cristiano de la Navidad poco a poco se empieza a extraviar.

1980-1989: Las ventas de Navidad son un indicador del desarrollo económico. De acuerdo con los expertos, los alemanes occidentales finalmente habían llegado a la era del consumo masivo a fines de los 80. Los regalos hace tiempo habían dejado de ser artículos de necesidad para convertirse en la compra de adminículos que en realidad nadie necesita y que se regalan solo por diversión.

Durante los noventa, los 17 millones de habitantes de la antigua RDA intentaron hacerse con las costumbres de sus compatriotas del oeste. Pero los negocios durante estas festividades solo vivían un período de garcia en la exRFA, no en la exRDA. Según los expertos, esto se debe a que la mayoría de los antiguos alemanes orientales siente una clara predilección por los productos hechos en Occidente.

El año 2000 los cristianos celebraron el segundo milenio del nacimiento de Jesús. Sin embargo, cada vez más alemanes parecen hacer abstracción de las razones de la festividad y empiezan a verlo como un acontecimiento distinto. Especialmente los jóvenes han desarrollado una visión más relajada de la fecha, y muchos de ellos salen de parranda tras entregar los regalos.

Las costumbres regionales alemanes rápidamente desaparecen y la festividad se convierte en algo más internacional. Muchos alemanes han adoptado la tendencia a iluminar y adornar sus jardines y fachadas con motivos navideños. Y buena parte de esta decoración ya no es hecha en casa o artesanal, sino producuida de forma masiva en Asia.