Periodistas mexicanos en el filo de la navaja
3 de octubre de 2009
Reporteros sin Fronteras publicó recientemente un informe titulado Los entresijos de la impunidad: escalada de la seguridad pública y pesadez burocrática, en el que realizó una evaluación de los mecanismos del sistema judicial y de las instituciones responsables de proteger la libertad de prensa en México.
La organización señala que las autoridades mexicanas no resuelven la mayoría de los crímenes contra los periodistas debido a que cuentan con grandes deficiencias operativas causadas por la corrupción, negligencia y pasividad de sus funcionarios.
“Nuestra conclusión es que las autoridades mexicanas no pueden luchar con eficacia contra la impunidad y resolver los casos pendientes por diversas razones, que van desde la infiltración del crimen organizado dentro de ellas hasta el exceso de burocracia que genera que se neutralicen los organismos especializados en la defensa de la libertad de prensa”, mencionó Benoit Hervieu, responsable del despacho de las Américas de Reporteros sin Fronteras.
Escalada de la violencia
Desde 2006, con la llegada al poder del actual primer mandatario mexicano Felipe Calderón y el inicio de su ofensiva contra los carteles del narcotráfico, la violencia se ha incrementado exponencialmente contra los periodistas y la población en general. “El balance de esta guerra sin nombre se eleva a casi 14,000 víctimas en dos años”, destacó Reporteros sin Fronteras en un reporte.
La ofensiva del Gobierno federal se encuentra concentrada en los estados de Michoacán y Guerrero, así como en la zona fronteriza con Estados Unidos, donde la presencia del narcotráfico ha desencadenado una ola de terror entre la población.
México encabeza desde 2005 la lista de países más peligrosos del continente americano para el ejercicio periodístico, con un saldo de 55 periodistas asesinados y ocho desaparecidos, según Reporteros sin Fronteras.
“Escapan del país o mueren”
Expertos mencionan que el aumento acelerado de la violencia contra los periodistas ha fomentado que muchos de ellos opten por emigrar a otros Estados dentro de México o, inclusive, a otros países.
“El fenómeno de los periodistas exiliados es muy reciente (...) Hay casos de periodistas mexicanos que se ubican en la zona fronteriza con Estados Unidos y se esconden en dicho país por algún tiempo. Hay quienes vuelven, pero hay otros que mueren después de haberse escondido, como fue el caso de Armando Rodríguez Carreón, quien se fue de Ciudad Juárez al Paso (Texas) y después regresó y fue asesinado en noviembre pasado”, dijo Benoit Hervieu.
La ola de asesinatos no ha tenido tregua en los últimos años. Ejemplo de ello es el reciente asesinato de Norberto Miranda, un periodista del diario digital mexicano Radio Visión. Miranda escribía la columna “Cotorreando con el Gallito”, en la que trataba temas relacionados con la violencia en la ciudad de Casas Grandes, Chihuahua. "Había recibido varias amenazas de funcionarios", declaró a la agencia Efe su compañero Emilio Gutiérrez Soto, quien pidió asilo en Estados Unidos en junio de 2008 a raíz de varias intimidaciones.
Estados Unidos debe tener control de armas
Reporteros sin Fronteras sugiere en su informe una restructuración profunda del sistema judicial mexicano y la implementación de reformas legislativas en cuestiones relacionadas con la libertad de prensa, aunque advierte que ningún cambio será fructífero si Estados Unidos no emprende medidas para controlar su producción de armas.
“Es absolutamente necesario que también haya un control de las armas de fuego por parte de Estados Unidos, por el vínculo que existe entre ambos países. Ochenta por ciento de la droga que pasa por México va a los Estados Unidos, mientras que ochenta por ciento de las armas de fuego que circulan en el territorio mexicano provienen de Estados Unidos. Esta es una de las raíces del problema y no se puede resolver nada si Estados Unidos no hace nada al respecto”, comentó Hervieu.
Deutsche Welle apoya la libertad de prensa mundial
Veinte años después de la caída del Muro de Berlín y el final de la Guerra Fría, los directores generales de Deutsche Welle, BBC World Service, Radio Francia Internacional, Radio Netherlands Worlwide y Voice of America "están conscientes de que la libertad de expresión en muchos países todavía no es una realidad".
En la actualidad, los periodistas aún se encuentran atados de manos con severas restricciones que les impiden realizar una cobertura libre. En su reunión anual organizada en Berlín, los jefes de las cinco mayores cadenas estatales e internacionales del mundo hicieron un llamado a los Gobiernos a eliminar los obstáculos para la libertad de prensa, y exhortaron a aplicar plenamente el Artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
En la actualidad, el periodismo todavía es considerado como una de las profesiones de mayor riesgo. "Durante el año pasado, cientos de periodistas de todo el mundo - incluyendo algunas de nuestras organizaciones - han sido hostigados, detenidos, exiliados, secuestrados o asesinados", señaló el grupo.
"Esto sólo fortalece nuestra determinación de aumentar nuestros esfuerzos para crear una sociedad civil global, donde el libre flujo de información y el diálogo de las culturas pueda tener lugar sin obstáculos", concluyó Erik Bettermann, director general de la Deutsche Welle, con sede en Bonn.
Autor: Iñaki Maillard San Jorge
Editor: José Ospina